Los cimientos que sustentan a Marta Riesco como profesional frente a cámara comienzan a tambalearse. Las contundentes pruebas mostradas por Rocío Carrasco respecto al asunto de la llamada han provocado que los rostros de 'El programa de Ana Rosa' le exijan a la reportera que cumpla con su discurso y muestre ese supuesto "as en la manga" que guarda.
Joaquín Prat, en 'El programa de AR'
La tarde del 3 de mayo llegó acompañada de una reconstrucción de la comida en la que Luis Pliego conversó con la denominada "digna novia del Ser". Mientras tanto, Carrasco se mostró tajante: "Yo nunca he llamado a Marta Riesco", sentenciaba sin titubear. Es más, las imágenes de las cámaras de seguridad reducían toda posibilidad para considerar como verídico el testimonio de la reportera.
Una jornada después, los tertulianos del matinal de Unicorn Content trataron el asunto: "Tiene que mostrar el as oculto; si no lo hace, estaremos ante una segunda mentira", aseguraba Alessandro Lecquio. Asimismo, no perdió la oportunidad de remarcar otra de sus falacias: "La primera mentira es que habló con Rocío Carrasco", proseguía.
Las voces del sofá del "Club social" comenzaban a alzarse contra Riesco, con Antonio Rossi dejando clara su postura: "Me parecía inverosímil que alguien se pudiera inventar algo así." Cuando se preguntaba "para qué se la llamó", la conclusión era unánime: "Desde luego, Marta tendrá que dar un paso hacia adelante o rectificar sobre lo que dijo. [...] Opino como vosotros, pero me parece todo un poco despropósito".
"Está sujeto a intereses o influencias"
A continuación, Cristina Tárrega reiteró que Riesco tenía que "demostrarnos que habló con Rocío Carrasco": "Ella dice que tiene pruebas y nosotros necesitamos ver esas pruebas", espetó con cierta indignación. Sin embargo, fue Sandra Aladro quien se mostró más que contundente mientras hacía balance de la situación y no dejando en muy buen lugar a la reportera.
Lo más leído
"Ayer la desmintió rotundamente [...] Lo que ha hecho Marta Riesco es una interpretación", comenzó aseverando. Prosiguiendo con su discurso, aseguró que la subjetividad estaba presente en sus intervenciones: "Está sujeto a intereses o influencias", sentenció. "Jamás se habla de cantar, jamás se habla de Rocío Carrasco... Lo que ha hecho es trasladar la oferta que le hace un periodista y ponerla en boca de Rocío Carrasco", concluyó.