Toda cita electoral televisada suele dejar alguna que otra anécdota al momento de sus intervenciones. Echando la vista atrás, los espectadores han visto adoquines, tesis para que su autor se leyese, listas interminables y gráficos que terminan por convertirse en memes. Sin embargo, la anécdota en esta ocasión no ha tenido a un candidato o candidata como protagonista, sino que ha sido la persona encargada de traducir a lenguaje de signos el discurso de Rocío Monasterio quien se erige como protagonista.
Rocío Monasterio en el debate electoral madrileño
Mientras que algunos reaccionaban con emoticonos de aplausos, afirmando que "¡Viva el lenguaje de signos!" o que "al traductor le está dando una embolia al escuchar eso", otros cargaban contra las cadenas de televisión por "permitir algo así". Sea como fuere, esta anécdota debe ponerse en contexto, pues la inacción del intérprete se debió a un fallo técnico.
Cuando tu discurso es tan xenófobo y racista que no puede traducirse al lenguaje de signos. pic.twitter.com/MQSa9L8Mbk
— Javier Durán (@tortondo) April 21, 2021
Que grande !!!
— Sisi Barrado ???????? (@marbarradov) April 22, 2021
Viva el lenguaje de signos!!!!!
— alicia filosofia (@AliciaFilosofia) April 22, 2021
Los medios no deberían permitir esto, si lo hacen son cómplices
— Drea (@onestepbeyong) April 22, 2021
Mis dieses por ese currante!
— Rafa Pardo (@rpardoalmudi) April 22, 2021
Cronología de lo ocurrido
Lo cierto es que todo se debe a un error que impidió al traductor escuchar lo que estaba ocurriendo en el plató de Telemadrid. Mientras los moderadores del debate explicaban cuáles eran las cadenas que estaban emitiendo el encuentro a nivel nacional, se pudo apreciar cómo el profesional unió sus manos a la altura del pecho, cincuenta y siete segundos después de que pasaran las 21h30.
A continuación, parecía que el intérprete volvía a iniciar su traducción, sin embargo, el sonido no se recuperó. Pablo Iglesias fue quien inició la ronda de presentaciones desde plató, de hecho, el candidato morado a presidir la Asamblea de Madrid tampoco tuvo esa traducción. Minutos después, el recuadro en el que aparecía el profesional desapareció y no fue hasta las 21h39 cuando volvió a estar en imagen.