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El Gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos ha recibido un nuevo revés este lunes con la publicación de un vídeo en el que Irene Montero opina libremente sobre el 8-M y el coronavirus sin saber que está siendo grabada. En la pieza, previa a una conexión del programa 'En Jake' de ETB realizada el día después de las manifestaciones, la Ministra de Igualdad admite que cree que hubo menos afluencia en la reivindicación feminista por la pandemia que ya empezaba a amenazar a Europa.
"Pero no lo voy a decir", admite a su equipo de comunicación. "Quiero ser muy prudente porque creo que la comunicación que se estaba haciendo desde el Gobierno es buena, basada en datos médicos", justifica Montero en el vídeo filtrado por ABC, añadiendo que no quiere alimentar "el sentimiento de pánico generalizado". En el mismo segmento, la Ministra se muestra consciente de que ya hay países tomando medidas "súper drásticas" y repasa algunos momentos de la manifestación en los que se le acercó gente a pedirle un abrazo.
Ferreras defiende a Montero en 'Al rojo vivo'
Mientras algunos ven en esto un signo de que el Gobierno decidió conscientemente anteponer la manifestación a la salud pública, otros defienden a Montero alegando que el estado de consciencia en la sociedad era aún muy temprano como para tomar medidas. A este último grupo pertenece Antonio García Ferreras, que no ha dudado en dar la cara por la Ministra: "No entiendo por qué llama tanto la atención", reconocía en 'Al rojo vivo' al abordar la noticia.
"Hay algo muy importante de la grabación: 'hacemos lo que nos dicen los médicos'", ha resaltado el periodista. "¿Te imaginas que con los médicos diciendo 'tranquilidad', el Gobierno hubiera ordenado confinamiento? La que se monta...", ha opinado, atribuyendo los errores del Ejecutivo a científicos y médicos. "Estaban equivocados, pero porque los médicos y científicos les decían que no había problemas", ha asegurado.
ETB amenaza con interponer denuncias
Ferreras tiene claro que la filtración está siendo utilizada como un "ataque total por parte de la extrema derecha". Desde ETB, cadena a la que pertenecen las grabaciones originales, anuncian posibles acciones judiciales "ante la interesa filtración y la difusión" de lo que corresponde a un vídeo para comprobar aspectos técnicos y en ningún momento debía ser emitido. En un comunicado oficial, la autonómica se desmarca de la filtración y "lamenta el daño reputacional" que pueda causar a Montero en su cargo.
