'GH VIP 8' alcanzó su sexta gala semanal la noche del jueves 19 de octubre, en la que Susana Bianca fue la primera expulsada. Sin embargo, dicha decisión de la audiencia se vio anulada con el pago de la "vida extra", a cambio de 25.000 euros, por parte de Zeus Montiel, tras lo cual se resolvió un duelo "express" entre sus dos compañeros, Albert Infante y Gustavo Guillermo, con la expulsión de la primera.
Tras la marcha de Bianca, el programa inició una votación entre Gustavo e Infante que, ante la avalancha de votos, dio muchos problemas a los espectadores, a los cuales se mostró un reparto bastante igualado al principio, con un 50,7% y un 49,3%. Asimismo, el programa dio a ambos nominados la oportunidad de elegir a uno de sus compañeros para lanzar un alegato a su favor, tarea que ejercieron Javier Fernández en el caso del madrileño y Carmen Alcayde, en el de la catalana.
Gustavo y Albert antes de la expulsión del catalán de 'GH VIP 8'
A ello se sumaron otros dos alegatos desde plató, por parte de la madre de Infante y de la mujer de Gustavo. "Tienes que volver a sacar ese brillo y no dejarte comer, sé fuerte que tú puedes", trató de animar la primera a la catalana, en un discurso con el que emocionó a Laura Bozzo y Carmen Alcayde, al darles las gracias por el apoyo que daban a Infante. Mientras, su compañero recibió también el cariño, además de las alabanzas, de su pareja: "Buen corazón, prudente, sensato y escucha a todo el mundo. Él es calma y corazón puro".
"Quería vivir esto"
Minutos después, Marta Flich comunicó la expulsión de Infante ante todos sus compañeros dentro de la casa, la mayoría de los cuales se lanzaron a felicitar a su rival, mientras Alcayde y Bozzo, al igual que Asensi, se despedían de la catalana con cariñosos abrazos. "Estoy un poco triste, claro, porque quería vivir esto. Me alegro por Gustavo, que es buena persona", declaró la catalana, consciente de que quizás el público "no me ha entendido con el tema de Michael".
Lo más leído
"La votación ha estado muy, muy ajustada", recalcó Flich, a pesar de que no se habían vuelto a mostrar los porcentajes y hubo muchas quejas de que no se podía votar a causa de la avalancha, antes de dar la oportunidad al italiano de despedirse de quien había sido uno de sus mayores apoyos dentro de la casa, algo que había cambiado en los últimos días por su distanciamiento a causa de las dudas que rondaban en torno a su relación.