'GLOW': Todo lo que necesitas recordar antes de ver la temporada 3

Damas y caballeros, prepárense en sus asientos para ver otro round de las más bellas y coloridas mujeres que han practicado nunca el noble arte de la lucha libre. Las chicas de 'GLOW' cada vez cuentan con una legión mayor de seguidores que esperan que lleguen a Netflix nuevos episodios de esta mezcla de humor sobre el mundo del espectáculo, drama humano y estética retro de serie B.

Todo un éxito respaldado por premios como los Emmy, que en 2019 nominaron a Betty Gilpin como Mejor Actriz de reparto en comedia, y que hasta ahora han acreditado el buen hacer de su universo de lucha libre con premios a sus especialistas y diseño de producción. Con motivo del estreno de la tercera temporada el 9 de agosto, desde FormulaTV refrescamos cómo ha ido la trayectoria de estas poderosas y problemáticas mujeres del ring hasta ahora y qué podemos esperar de las nuevas entregas.

1 La ciudad del pecado

La mala prensa y las relaciones tirantes entre las aguerridas luchadoras de la serie y los directivos de la K-DTV (o más bien el acoso sufrido por Ruth de parte de su director) provocaron que el show televisivo de las Gorgeous Ladies of Wrestling sufriera pérdidas de patrocinadores y cambios a horarios intempestivos. Un problemático desarrollo de la que el espectáculo femenino lograba salvarse gracias a su reconversión a otro formato.

Como la K-DTV posee por contrato los derechos de explotación televisivos del programa de lucha libre en que se ambienta 'GLOW', su única forma de continuar fuera de la cadena era aceptando la proposición del adinerado propietario de un casino de adaptar su delirante universo a un espectáculo en vivo. Es por ello que las chicas deben adaptarse a vivir en Las Vegas, una ciudad acelerada y llena de estímulos que a buen seguro las meterá en nuevos problemas.

2 Una nueva Debbie

Los cambios se agolparon en la vida de Debbie (Betty Gilpin) en la temporada anterior. Tras un divorcio con Mark (Rich Sommer) que no estuvo exento de turbulencias emocionales, Debbie se volcó totalmente en su trabajo hasta el punto de convertirse en productora del programa. La luchadora que se enfunda en los patrióticos colores de Liberty Belle en el ring se hizo también con los despachos para salvar a toda costa su espectáculo.

No obstante, este nuevo estado empoderado podría verse interrumpido ahora por la conversión de su formato de lucha libre. Al fin y al cabo, incluso aunque conserve el poder de decisión que tenía cuando su show se transmitía por televisión, en esta tercera temporada Debbie podría tener una dura competencia al tener que lidiar con la dueña del Fan Tan Hotel y Casino, Sandy Deveraux St. Clair, una mujer de armas tomar interpretada por Geena Davis que también tuvo una carrera en el mundo del espectáculo y bien podría querer imponer su criterio.

3 La decisión de Ruth

En la temporada anterior vimos cómo Ruth (Alison Brie) asentaba su relación con Russell (Victor Quinaz), el cámara de su serie de televisión, con un amor que sobrevivía al final de la temporada. Sin embargo, no todo es tan sencillo para la encarnación de Zoya the Destroya bajo las mallas. Al fin y al cabo, el noviazgo entre Russel y Ruth se transforma en una relación a distancia con la mudanza a Las Vegas. Y eso sin contar al tercero en discordia.

Y es que, en una controvertida escena durante una atropellada fiesta, Sam (Marc Maron) trata de besar a Ruth. Lo que para muchos era una relación paternofilial giró en ese momento a algo más, algo que podría ganar peso teniendo en cuenta que Sam sigue ligado al nuevo espectáculo en directo mientras que Russell no. Además, la reacción posterior de Ruth a aquel acercamiento evidencia que podría tener dudas acerca de qué romance le conviene más.

4 Rivales, ¿dentro y fuera del ring?

Aunque la competición por Mark Eagan finalizó cuando Debbie se divorció de él, la luchadora patriótica estadounidense y la de parafernalia soviética parecen condenadas a enfrentarse, también fuera del ring. Al fin y al cabo, desde su nueva posición como productora, Debbie boicoteó la nueva relación con Russel de Ruth haciéndola trabajar horas extras. El coqueteo con la cocaína de Debbie llevó este enfrentamiento a lo físico como nunca antes en la serie, ya que acabó con Ruth lesionada del tobillo.

Pero, lejos de otras rencillas puntuales, el momento en el que se evidenció que ambas tenían puntos de vista diferentes sobre su trabajo fue cuando no se pusieron de acuerdo sobre cómo manejar el acoso que Ruth sufrió del presidente de la K-DTV. La determinación de Debbie la llevó a decir que habría tenido que acostarse con él, causando un lógico impacto en su compañera. Sin embargo, la amistad que ambas compartían al inicio de la serie siempre resurge y puede que las una en un ambiente nuevo y desconocido, como es Las Vegas en esta tercera temporada.

5 Saliendo de dudas

La sexualidad de Bash (Chris Lowell) es un asunto apenas tratado en la serie, pero es una de las grandes incógnitas por las que se preguntan los fans. Muchos quisieron ver una tensión con su mayordomo y gran amigo, Florian, pero la reacción del productor al descubrir el ambiente gay en que el personaje de Alex Rich se movía y su posterior muerte debida al sida podría haber hecho que reflexionase sobre si podría abrazar abiertamente ese estilo de vida.

Por ahora, las apetencias del rico heredero siguen siendo un misterio para el espectador. Es verdad que, de cara a la tercera temporada, no parece posible que Bash tenga el cuerpo para muchos amoríos, ya que está claro que la desaparición de Florian causó un profundo efecto en él. Sin embargo, al mismo tiempo el tráiler de esta nueva tanda de episodios le muestra en un hotel, compartiendo una escena con un chico en una actitud que parece romántica. Toda una encrucijada para el principal impulsor de las damas de la lucha libre fuera del ring, que le podría enfrentar a sus propios miedos y prejuicios.

6 ¡Vivan los novios!

El último episodio emitido en televisión del espectáculo que da nombre a la serie prometía una boda. Concretamente, la de Rhonda (Kate Nash), la luchadora que actúa bajo el nombre de Britannica, y Cupcake (Patrick Renna), su fan número uno. La ceremonia televisada no estaba tan falseada como las peleas representadas en la serie, aunque como estas tenía truco: en realidad se trataba de un matrimonio de conveniencia que Rhonda había aceptado a regañadientes para poder continuar en los Estados Unidos y no ser deportada.

Sin embargo, la unión nunca llegó a celebrarse gracias a la oportuna aparición de Bash. El productor objetó en la boda y, más que eso, se propuso como pretendiente a la novia. Así Cupcake fue finalmente rechazado y la boda se produjo con Bash, dando lugar a una curiosa situación, dada la ya mencionada ambigua sexualidad del recién casado. Esto, junto a unos posibles celos de Carmen (Britney Young), prometen un triángulo amoroso de lo más peculiar de cara a la tercera temporada.

7 Las otras luchadoras

Si bien es cierto que desde su primera temporada las luchadoras principales y los ejecutivos en torno al show ficticio de 'GLOW' han acaparado la mayoría de las tramas, la segunda temporada hizo un esfuerzo por desarrollar más la gran familia de variopintas mujeres que se nos presentan. Por ejemplo, incorporaron a una recién llegada, Yolanda (Shakira Barrera), que no tardó en encontrar su sitio y cuya relación con Arthie (Sunita Mani), la encarnación de Beirut, promete futuras nuevas tramas LGTB en un contexto aún opresivo como es el de los 80.

Por otro lado, gran parte de las luchadoras que ya se nos habían presentado tuvieron un mayor protagonismo. Es el caso de Justine (Britt Baron), que, tras revelarse en la primera temporada como la hija perdida de Sam, trata de compaginar en secreto su vida universitaria con pequeños papeles en el espectáculo de su padre. Sin embargo, su madre lo descubre al final de la temporada y la propia Justine decide mudarse a Sacramento con ella. Una localización que ahora no estará lejos de la nueva ubicación del espectáculo en Las Vegas, donde se podría recuperar de nuevo esta relación padre-hija que apenas ha explorado con Sam. Quien afianzó más su relación con su hijo fue Tammé (Kia Stevens), ya que le reveló su trabajo en 'GLOW' y consiguió al fin la aceptación por su parte que tanto necesitaba.

8 La gemela buena

Uno de los grandes momentos de la segunda temporada fue "La gemela buena", el capítulo en el que, al fin, pudimos ver cómo era un episodio al completo del programa de lucha libre en torno al que gira la serie. Como si fuéramos un espectador más, pudimos disfrutar de las actuaciones exageradas, las escenas delirantes y las tramas propias de cualquier revista pulp de la época.

Todo un hito en la serie que encandiló a la audiencia por lo original y metaficcional del formato. No es de extrañar que pronto las redes sociales clamasen por otro episodio así, aunque ya no podría ser igual teniendo en cuenta el cambio de formato que el show creado por Sam Sylvia sufre de cara a la tercera temporada. Eso sí, no es descartable que veamos algo parecido, adaptado al nuevo espectáculo en directo de Las Vegas.