Harvey Weinstein ha sido condenado a 23 años de cárcel. Es el punto final a un mediático proceso legal después de que el exproductor y magnate de Hollywood fuese hallado culpable, a finales de febrero, de agresión sexual a la ayudante de producción Mimi Haleyi en 2006, forzándola a practicar sexo oral; y de violación en tercer grado a la actriz Jessica Mann en el año 2013.
Harvey Weinstein
Las seis mujeres que testificaron en el juicio que finalizó el 24 febrero estuvieron presentes también en la sala del tribunal, a la que Weinstein se dirigió para expresar su "profundo remordimiento" a la par que mostraba su rechazo al movimiento #MeToo antes de que se dictase la sentencia, según ha informado Variety. "Estoy totalmente confundido. Creo que los hombres están confundidos y estoy preocupado por este país", ha afirmado tras conocer la sentencia, seguro de que "esta no es la atmósfera correcta para Estados Unidos".
Evitó la cadena perpetua
Cabe recordar que el productor ya había evitado la cadena perpetua tras no ser aceptados los tres cargos más graves de los que se le acusaban. El jurado del proceso legal, que se alargó casi dos meses hasta finales de febrero, acabó exculpando a Weinstein de los cargos de violación en primer grado (con arma o violencia extrema) y los dos de agresión sexual "depredadora".