El que fuera concursante de 'Gran Hermano' en su edición número 14, la cuál ganó la influencer Susana Molina, vuelve a tener problemas con la justicia. Ahora se podría enfrentar a pena de cárcel con hasta 5 años de prisión por un presunto delito de estafa relacionado con el juego. Un delito recurrente para el vasco , quien acumula cinco sentencias desde el año 2006, también relacionadas con las estafas, aunque ahora su situación parece más grave que en otras ocasiones.
Igor Basurko, tal y como aparece en el escrito de la fiscalía provincial de Guipúzkoa, habría utilizado la tarjeta de una mujer (ya fallecida) con la que "estuvo pernoctando" para acceder a una conocida página de apuestas online. Según explican, su presunto modus operandi fue "apoderarse de la numeración" y poder hacer así tres depósitos de 875, 400 y 200 euros en concepto de apuestas. Este hecho habría ocurrido en junio de 2020, y la cifra total asciende hasta los 1.475 euros estafados a cuenta de la víctima.
Igor en 'Gran Hermano 14'
Para abrir esta cuenta en dicho portal web, el imputado habría utilizado una cuenta a nombre de su madre. A pesar de que ella habría dado la autorización, ha afirmado no tener conocimiento de quién podría usar esa cuenta. Por su parte, el acusado ha declarado "no ser muy consciente de las cosas" que le ocurrían en aquella época, y dice no saber quién hizo esos tres depósitos de los que se le acusa. Mantiene que compartía ese perfil en la web de apuestas con otras personas con las que pernoctaba en la época.
Los problemas que arrastra Igor Basurko
Desde que el propio protagonista concediera una entrevista a 'Sálvame' en el año 2014 hablando abiertamente de sus problemas que lo habían llevado incluso a separarse de su hijo, se han conocido otras controvertidas informaciones del televisivo.
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La primera sentencia, en el año 2016, le condenó a pagar 320 euros tras realizar varios pagos con la tarjeta de una mujer con la que había tenido una cita. Otros le acusan de que vendía en Facebook máquinas Thermomix a un precio muy económico y que, tras obtener el dinero, nunca mandaba el paquete. La última andanza de Igor Basurko es en Onlyfans, donde emite contenido erótico por 100 dólares al año.