OPINIÓN

La importancia del entretenimiento televisivo en tiempo de coronavirus

Durante el confinamiento por el COVID-1, la pequeña pantalla se ha convertido en un medio fundamental para informarnos y también para entretenernos.

Por Cristian Quijorna El 17 de Abril 2020 | 10:12

¿Quién nos iba a decir hace varios meses que íbamos a tener que estar sin poder salir de casa por una pandemia mundial? Es probablemente una de las preguntas que más nos hemos repetido en las últimas semanas y es que el coronavirus nos tiene desde hace ya un tiempo a todos encerrados en nuestros hogares. Es nuestra particular forma de luchar contra este maldito virus que se ha llevado ya la vida de miles de personas en todo el planeta. Y poco a poco, lo estamos venciendo, sí. Pero no está siendo nada sencillo hacerlo y es que pasar horas y horas confinados no está resultando fácil para nadie.

Muchos han convertido sus salones en pequeños gimnasios, otros nos invitan a conciertos en sus habitaciones, algunos nos regalan lecturas y poemas mientras que no son pocos los que se han convertido en panaderos y reposteros improvisados. Pero más allá de hacer deporte, cocinar o leer, sin duda, hay algo que sí hemos hecho todos en estos días de confinamiento: ver la televisión. Sí, la hemos tenido siempre en nuestros salones, cocinas o habitaciones pero en esta cuarentena se ha convertido en una compañera fundamental. Es una aliada más en nuestro confinamiento y prueba de ello son los récords de audiencia que está cosechando en las últimas semanas. Todos hemos encontrado en ella una ventana al mundo, ya sea para conocer la evolución de la crisis sanitaria en todo el mundo o simplemente para entretenernos.

Belén Esteban en 'Sálvame'

Porque sí, en tiempos de crisis el entretenimiento es vital y necesario, y por ello, la televisión se ha convertido sin duda en indispensable para muchos. Porque más allá de informarnos, este medio se ha convertido en una opción perfecta para evadirnos de la realidad, para desconectar y para sin duda, alejarnos, aunque sea por unos minutos, del drama que sacude a nuestro país. Porque en tiempos como estos, es también necesario reírnos, emocionarnos, disfrutar... es necesario desconectar por unos segundos de todo lo que está sucediendo, es vital que la televisión se convierta en una herramienta de información pero también de entretenimiento puro y duro.

Cocinar con Belén Esteban...

Recordemos que millones de personas tienen a la televisión como su única compañía. Hay miles de ancianos en nuestro país que están pasando este confinamiento en soledad y este medio es ya su única ventana al mundo. Para estas personas sí es necesario que por ejemplo, un formato como 'Sálvame' les haga compañía cada tarde. Y es que mientras algunos políticos han hablado de telebasura en tiempos de coronavirus, yo hablo de función social. Porque sí, un formato como el de Jorge Javier Vázquez y Carlota Corredera, además de informar y tranquilizar a un segmento de audiencia especialmente sensible, también entretiene, hace reír y sin duda, da sentido a un medio como este. Porque serán muchos y muchas las que no dejen de sonreír viendo a Belén Esteban cocinar tortilla de patatas, a Jorge Javier raparse en directo o Lydia Lozano ponerse histérica desde el salón de su hogar. 'Sálvame' les salva las tardes de confinamiento, sin duda.

Pablo Motos en 'El hormiguero'

... o reír con Trancas y Barrancas

Lo hace este programa o 'Supervivientes' y es que sus concursantes, que viven su particular aventura alejados de este drama que azota al planeta, están consiguiendo entretener y evadir a millones de personas. Ese entretenimiento es necesario, lo es para millones de personas. También el que ofrecen los habitantes de 'El hormiguero' más conocido de nuestra televisión que sin duda están aportando positivismo, humor y mucho cariño a su público. Su compañía es fundamental para los millones de personas que están enganchados cada noche a todo lo que pasa en ese plató y que no, no quieren escuchar discursos políticos ni críticas sobre la situación actual, simplemente quieren divertirse y entretenerse (recuérdalo, Pablo Motos). Porque si el humor es el protagonista, el esfuerzo de esas decenas de personas que trabajan muy duro por sacarlo adelante, vale más la pena que nunca.

La televisión ahora se hace en casa

Porque no son pocos los programas que ahora se hacen desde casa y no nos engañemos, no es nada fácil. Para un equipo es de todo menos sencillo el trasladar la producción de formatos a hogares, pero lo están haciendo. Andreu Buenafuente con su 'Late Motiv' o Wyoming con 'El intermedio' nos están regalando noches maravillosas por ejemplo, mientras que el equipo de 'Todos en casa' ha demostrado que es posible sacar adelante un programa desde casas repartidas en toda España en apenas unos días. Gracias, gracias a a todos, porque el esfuerzo está valiendo la pena; el esfuerzo de centenares de profesionales que integran todos esos formatos que están luchando cada día para salir adelante y para seguir formando parte de este invento mágico llamado televisión.

Esos programas nos están entreteniendo, pero también otros grabados, que ya sea con entregas nuevas o reposiciones se han convertido en fundamentales en nuestro día a día hogareño. ¿De verdad imaginamos una televisión sin estos momentos de pura diversión y surrealismo? Creo que no. Porque en tiempos de coronavirus también nos gusta seguir girando la ruleta, enamorarnos en el restaurante más famoso de la televisión, convertirnos en cocineros en las cocinas de 'MasterChef', costureros en las de 'Maestros de la costura' o en pasar sábados deluxe. Nos gusta entretenernos con buenos programas que nos emocionan, nos hacen reír y nos hacen disfrutar en momentos en los que imaginamos que todo lo que estamos viviendo es simplemente un mal sueño, una historia que no existe.

Protagonistas de 'Acacias 38' y 'El secreto de Puente Viejo'

La ficción, más necesaria que nunca

Una historia en nuestra mente, como esas historias que centran las centenares de ficciones que también se han convertido en compañeras en este tiempo de confinamiento. Porque no, en este tiempo tampoco nos podemos olvidar de esa industria que ahora ha parado por el maldito virus pero que nos está regalando horas de entretenimiento con su arte. Las series diarias y también esas que forman parte de los catálogos de las decenas de plataformas que tenemos en nuestro país se han convertido en perfectas para hacer más llevadera esta crisis. Gracias, gracias a todos esos profesionales que han luchado por sacarlas adelante, que nos han regalado simplemente su arte.