El 8 de marzo de 2017 ha pasado a los anales de la historia de nuestro país por ser un día en el que toda la sociedad mostró conciencia respecto al machismo que, por desgracia, todavía impera. Aunque nos autoproclamemos países desarrollados, aún nos queda mucho por hacer para lograr ese título y la primera tarea que tendríamos que poner en la lista se llama igualdad. Por eso, cada vez, tal y como se vivió en El día de la Mujer, somos más conscientes de cada error que tenemos en esta materia, para corregirlo y evitar que vuelva a suceder.
Omar Montes con Techi, con quien mantiene una relación dentro del concurso
Así, cuando Omar Montes incitaba en 'Gran Hermano: VIP' a su compañero Asraf a meterse en la cama de Miriam Saavedra, que se encontraba en estado de embriaguez, las redes alertaron al instante de que el comportamiento del concursante distaba mucho de ser algo en pro de la igualdad. Todo lo contrario, ha sido calificado como un claro ejemplo de que aún vivimos en la cultura de la violación. "Túmbate con ella, gilipollas, que ella quiere", incitaba el cantante a Asraf, que rechazaba la "propuesta": "A mí no me van esas cosas", ante lo que Omar insistía: "¿No te gustan las chicas o qué, hermano?", a modo de provocación.
Los seguidores del programa inundaron las redes para pedir que se tomaran medidas disciplinarias contra el concursante, entre ellas la expulsión, pero el programa decidió dejar en manos de la audiencia el futuro de Montes, aunque en ningún momento se dio a elegir la expulsión. Como era de esperar, un 83,7% de los votos optaron por una nominación disciplinaria.
"Caldo de cultivo de violencia hacia las mujeres"
En esta línea, en un reportaje para el Periódico, varias expertas en feminismo se han reunido para debatir el tema, entre ellas Silvia Buabent, directoria del Instituto de la Mujer para la Igualdad de Oportunidades, del Ministerio de Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, que no ha dudado en criticar el comportamiento y afirmar que se van a poner en contacto con la cadena "apelando a su responsabilidad social" para "que tome medidas".
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"Este tipo de programas de máxima audiencia deberían servir para dar ejemplo y rechazar este tipo de actitudes y comportamientos. Y, por supuesto, el concursante debería ser expulsado", zanja la experta. Así mismo, desde la institución han emitido un comunicado en el que denuncian que "algunos programas de telerrealidad son caldo de cultivo de violencia hacia las mujeres", algo especialmente peligroso teniendo en cuenta que son programas de una audiencia especialmente joven, que pueden tomar por buenos tales comportamientos si ven que no se penalizan. "Es inadmisible que estos contextos puedan, en ocasiones, admitirse o alentarse en aras de incrementar los índices de audiencia", sentencian.