Irene Montero reaparece en 'ARV' y defiende su actuación con el 8M: "Hicimos lo que dijeron los expertos"

Irene Montero ha hecho su primera aparición pública desde que el pasado jueves 12 saltase la noticia de que había dado positivo en la prueba del COVID-19. Lo ha hecho en 'Al rojo vivo', en una pequeña entrevista telemática con Antonio G. Ferreras en la que ha discutido sobre los paquetes de medidas que tiene pensado aprobar el gobierno próximamente para paliar los efectos de la crisis.

No obstante, el punto en el que más han incidido ha sido en la manifestación del Día de la Mujer, la cual se celebró con una Italia medio agonizante por el coronavirus. "EL 8M se tenía que haber cancelado", sentenciaba Ferreras, a la par que lanzaba la pelota al campo de Montero. "Hicimos lo que dijeron los expertos y autoridades sanitarias", espetaba la política, que no ha dado su brazo a torcer ante los que piden una disculpa. "Ese fin de semana, se celebraron cientos de eventos deportivos y culturales. Vistalegre también fue ese fin de semana". La política prefería echar el balón fuera.

A pesar de su escudo en los argumentos de expertos y autoridades, Montero ha olvidado que esta última semana El Mundo daba a conocer un informe del Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades fechado a día 2 de marzo en el que se recomendaba "evitar concentraciones masivas innecesarias". Fernando Simón, el portavoz técnico del Gobierno en la crisis del coronavirus, asesora a este organismo.

Utilización partidista

A pesar de los intentos de Ferreras de encontrar una especie de disculpa o rectificación por la manifestación, Montero ha preferido escudarse en eventos como Vistalegre, al cual Ortega Smith también acudió contagiado de coronavirus. "De eso nadie habla", reprochaba, a la par que denunciaba los niveles de odio y saña que están recibiendo las mujeres por parte de la extremaderecha a causa de este hecho.

Si bien, en última instancia, sí que ha reconocido que, "cuando pase esta crisis y nos podamos sentar con calma", el ejecutivo se reunirá para ver qué decisiones se podrían haber tomado de una manera prematura y haber evitado así las 4.000 muertes que acumula a fecha de 26 de marzo España a causa del coronavirus.