Jordi Sánchez ha estado en el programa 'Más vale tarde' para contar su dura experiencia ingresado en UCI, luchando contra el coronavirus. El actor de 'La que se avecina' estuvo 24 días intubado, debatiéndose entre la vida y la muerte, y no dudó en relatar su experiencia, buscando también concienciar a la población: "Entiendo que con 20 años tienes muchas ganas de fiesta y es muy complicado gestionar esto. Nos ha tocado esto, a mis abuelos les tocó ir a la guerra. A cada uno le toca lo que hay y tienes que hacer un esfuerzo. Si no no vamos a acabar con esto".
Jordi Sánchez en 'La caza. Monteperdido'
Jordi confesó que uno de los episodios más duros lo vivió por culpa del desconcierto que sufrió al despertar del coma, cuando no lograba distinguir qué era real y qué no y pensó que su hijo había muerto. "Lo del coma inducido es un horror, te levantas super confundido, no sabes si tus delirios son reales... Es un espanto. Pensé muchas cosas y todas desagradables". "Creí que mi hijo había muerto. Incluso llegué a hacer los papeles para enterrarlo", explicó el actor en otra entrevista.
Y es que salir del coma fue un indicativo de su mejoría para los médicos, pero toda una odisea para él: "No podía ni andar. Todo el mundo estaba muy feliz porque había despertado, pero yo no entendía nada. Ellos estaban esperando a que me sacaran del coma y yo estaba desesperado porque estaba hecho un desastre". A pesar de todo, el actor cuenta positivo que su recuperación progresa adecuadamente y estará al 100% en unos meses.
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Jordi le relató a Hilario Pino cómo está siendo su recuperación tras conseguir salir de la UCI, la cual se basa sobre todo en recuperar la musculatura que perdió por culpa del virus y su período en coma. "Estoy flojo de piernas aunque ando cinco o seis kilómetros cada día. Tengo que ir al fisio a coger masa muscular porque ya estaba delgado por la serie que estaba grabando y he perdido ocho kilos más", explicó el actor.