Los espectadores comenzaremos a ver el final de 'Juego de Tronos' en la madrugada del 14 al 15 de abril con el estreno de la octava temporada, pero el rodaje de esta entrega definitiva llegó a su fin en julio de 2018 en Irlanda del Norte. Tras ocho años de trabajo levantando una serie que pasará a la historia de la televisión como es la fantasía épica de HBO, es lógico que la celebración que siguiese a ese final fuese al menos de las mismas proporciones, y así lo ha asegurado Lena Headey.
Lena Headey como Cersei Lannister en la séptima temporada de 'Juego de Tronos'
La actriz que interpreta a la implacable Cersei Lannister ha sido entrevistada por The Daily Beast, y al diario le ha contado cómo fue estar en esta auténtica juerga medieval. "Hubo una fiesta de fin de rodaje enorme, y no se me dan demasiado bien las fiestas de fin de rodaje, pero esta fue increíble", afirmaba Headey sobre el evento que se celebró el verano pasado en Belfast.
Entre las 2.500 personas que acudieron a la gran fiesta estaban algunos personajes que llevan tiempo desaparecidos de la serie, como Sean Bean o Jason Momoa, el último de los cuales se reveló como la auténtica alma de la fiesta. "Momoa estaba allí y es increíble. Es un tipo muy divertido", recordaba la actriz, que bromeaba con la muerte de su personaje, Khal Drogo, para dar una idea del alcance de la fiesta: "Los muertos se levantaron y bebieron un montón de alcohol".
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Sin embargo, llegó un momento en el que tanto desfase fue demasiado para ella: "Había muchas cosas pasando y mucha bebida, pero yo estaba en plan: '¡Paz! ¡Hasta luego!'". Y es que la actriz está dispuesta a cerrar sin pensárselo esta etapa de su vida como la fiera reina de Poniente y pasar a otra cosa, sin temer que el público la tenga encasillada: "Aprecio todo el éxito, y si viene con el hecho de que la gente crea que eso es todo, estaré encantada de demostrarles lo contrario".