Nueve años después de que el cámara Mario Biondo, marido de Raquel Sánchez Silva, fuera hallado muerto en su domicilio semiahorcado en una estantería y con signos de violencia en su cuerpo, la justicia italiana ha emitido una sentencia en la que descarta completamente el suicidio, como había determinado la justicia española, y afirma que la muerte de Biondo fue un homicidio llevado a cabo por autores desconocidos.
Mario Biondo posa junto a sus padres
Según recoge ABC, la justicia italiana, que el lunes 1 de agosto decidió archivar la causa por "evidentes limitaciones procesales", da así la razón a la familia del cámara, que siempre ha defendido la teoría del asesinato. De hecho, los padres del italiano contrataron abogados y criminólogos para tratar de discernir lo que ocurrió realmente la noche de la muerte de Biondo.
No obstante, la sentencia refleja que han transcurrido demasiados años como para "practicar diligencias" que deberían haberse llevado a cabo, pero no se realizaron, en el período de instrucción desde España. En el escrito, también se destaca que "las contradicciones contenidas en las declaraciones de la viuda de Biondo deberían haber inducido a los investigadores españoles a realizar escuchas telefónicas para determinar la verdad de los hechos".
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La familia, muy agradecida
Ante esta sentencia, la familia ha dado las gracias en un comunicado al juez de instrucción de Palermo y a todos los representantes legales que los han asistido desde la muerte de Biondo, al igual que se muestran satisfechos por el hecho de que se haya podido probar que el cámara no se suicidó, sino que pudo ser víctima de un asesinato. Sin embargo, esto no garantizaría que la causa se abriera en España, después de años en los que la familia del cámara ha lanzado duras acusaciones contra Sánchez Silva por obstaculizar supuestamente la investigación. Mientras, la presentadora siempre ha guardado silencio públicamente al respecto.