'Sálvame' sigue analizando las llamadas que su ahora íntima amiga Isabel Pantoja está haciendo por todos los programas de la cadena. Tras la histórica conversación del pasado viernes 14 de septiembre, la tonadillera volvía a conectar con el programa una semana después. La última polémica del clan Pantoja viene de la mano de Kiko Hernández y Chelo García-Cortés, que ha caído en una peligrosa trampa del colaborador.
Kiko Hernández llama a Chelo Gª Cortés en 'Sálvame'
Kiko Hernández llamaba en directo a Chelo García Cortés para intentar sonsacar información sobre un posible chivatazo que ella habría dado a Isabel Pantoja. El colaborador afirmaba delante de sus compañeros que Chelo habría sido la persona encargada de desvelarle a Pantoja el nombre del hotel donde se estaría alojando Dulce en Madrid. Hernández conectaba con la periodista haciéndola creer que estaba en publicidad y que la conversación no estaba siendo grabada.
"Estamos en una publi", empezaba diciendo él. Tras una larga conversación, Kiko intentaba sonsacarle información a su compañera de programa. "A mí me han dicho que has sido tú, así entre tú y yo", le decía Hernández. "Te prometo que yo no lo he dicho, para nada", continuaba afirmando ella. Chelo, cada vez más natural al saber que no estaba siendo grabada, comenzaba a hablar sobre el clan Pantoja y lo que opinaba sobre las llamadas de Dulce y la tonadillera al programa.
Belén Esteban vuelve a engañar a Chelo Gª Cortés en 'Sálvame'
Minutos después, Belén Esteban volvía a marcar a la colaboradora y la volvía a engañar haciéndola creer que se había salido del plató para hablar con ella: "He salido, estoy con Rocío", le empezaba diciendo la princesa del pueblo. "Me parece muy feo por su parte, ¡Hombre! Estoy molesta, soy su compañera, una llamada así no me parece", decía Chelo al enterarse de que habían emitido sus palabras.
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Chelo estalla y cuelga el teléfono
Kiko Hernández intentaba solucionar el enfado de Chelo volviéndola a llamar, pero el colaborador continuaba engañando a la reportera de Diario Che, "Ahora sí que me he apagado el micro", le intentaba decir Kiko. El enfado de la colaboradora fue tan gran que decidió colgar el teléfono a su compañero: "¡Venga, hasta luego!", le dijo instantes antes de finalizar la llamada.