Kiko Matamoros admite sus mayores inseguridades: "Tengo una obsesión con el físico"

Kiko Matamoros es uno de los colaboradores más longevos de 'Sálvame'. Su comportamiento a lo largo de las temporadas del programa de La Fábrica de la Tele ha ido evolucionado, pero siempre se ha caracterizado por ser un hombre serio que no muestra sus emociones. Esa faceta ha cambiado después de su paso por 'Supervivientes 2022'.

Su participación en el reality le ha cambiado en muchas cosas, incluso ha llegado a desvelar que le ha puesto en una situación "casi al límite". Por eso, ha decidido abrirse en canal con Cristina Soria, la coach emocional del programa: "Lo que he sentido es impotencia conmigo mismo. En cierta manera, me he defraudado", aseguraba. Asimismo, ha garantizado que se le crearon muchas inseguridades al ver cómo iba perdiendo fuerza con el paso de las semanas.

Además de hablar de su situación emocional, ha desvelado uno de los grandes complejos que marca su vida: "Tengo una obsesión con el físico desde que tengo 18 años". Precisamente, esa obsesión fue la que le ha pasado factura a raíz del formato de Bulldog TV: "Estaba rodeado de gente bastante más joven que yo, que físicamente ante situaciones extremas responden de diferente forma".

Harto de las bromas sobre la diferencia de edad con su pareja

El tertuliano ha explicado con qué se relaciona este complejo con el físico y la necesidad de compararse con los demás: "Las alusiones a mi edad, a la diferencia de edad con mi pareja son cosas que sobran. Me causa mucho rechazo y mucho dolor tener que enfrentarme a eso porque no solo me ofende a mí, sino a ella también".

A pesar de los comentarios, ha asegurado que es consciente de sus limitaciones. Sin embargo, ha pedido ayuda a la dirección: "Una petición de respeto que no se juegue con mi edad ni con la diferencia de edad con mi pareja, que me hace un poco perder el control de los nervios". Por su parte, ha asegurado que se compromete a lograr mucha más templanza y diálogo con sus compañeros.