Del extenso reparto de 'Juego de Tronos', Kit Harington ha sido probablemente el que más abiertamente ha hablado sobre lo mal que lo estaba pasando tras el final de la serie. Y tanto es así que el actor llevaría el último mes ingresado en un centro de rehabilitación para recuperarse del estrés y el agotamiento, y tratar sus problemas con el alcohol.
Kit Harington
Al parecer Harington se estaría sometiendo a tratamientos de terapia cognitiva conductual, entrenamiento psicológico y meditación mindfulness para combatir el estrés y lidiar con sus emociones negativas. La información poco después fue confirmada por el publicista de Harington mediante un comunicado: "Kit ha decidido utilizar esta pausa en su agenda como una oportunidad para pasar un tiempo en un retiro de bienestar para trabajar en algunos asuntos personales."
Un duro adiós
Como decíamos, el británico ha hablado sin tapujos sobre los altibajos emocionales que ha sufrido durante los últimos años. Su salud mental empeoró después de la muerte de Snow, justo cuanto el personaje se convirtió en el centro de atención de la serie, y decidió acudir a terapia. "Era un muy buen momento de mi vida. Sentía que debía sentirme la persona más afortunada del mundo cuando, en realidad, me sentía muy vulnerable", confesó el actor al recordar su momento más oscuro. "No me gustaba que el foco de atención de toda la serie fuese Jon. Cuando te conviertes en el cliffhanger de una serie de televisión en su máximo apogeo, la atención sobre ti es jodidamente terrorífica."
Precisamente hace tan sólo unos días pudimos ver en el documental 'La última guardia', el especial emitido el pasado domingo que repasa la producción de la última temporada de 'Juego de Tronos', a Harington especialmente emocionado durante la lectura del guión del último episodio. Su reacción llamó mucho la atención, pero lo que no sabíamos era que el actor volvió a recurrir a la terapia tras descubrir el destino de su personaje.
"En mi último día de rodaje, me sentí bien hasta que fui a grabar mis últimas tomas y empecé a hiperventilar. Acabamos de rodar y de repente sufrí un colapso nervioso. Sentí como una embestida de alivio y duelo al darme cuenta de que no lo volvería a hacer nunca más", confesó Harington en una entrevista para Esquire. "Pero lo más raro fue cuando salimos del set. Empezaron a quitarme la ropa y sentí que me estaban despellejando. Parecía como si estuviesen desgarrando al personaje por última vez".