'La Casa de Papel': Todo lo que debes recordar antes de ver la tercera temporada

Llegó el momento que muchos esperaban. Tras convertirse en un fenómeno mundial, 'La Casa de Papel' regresa con su tercera temporada el viernes 19 de julio en Netflix. Como la plataforma de pago anunció en abril de 2018, la ficción deja Atresmedia para saltar directamente a Netflix. Con este cambio, la duración de cada uno de los ocho capítulos se adapta a los estándares de los diferentes países a los que llega la ficción, reduciéndose a una media de 45 minutos.

Como no podía ser de otra manera y después de que el final de la segunda temporada fuera tan cerrado, la tercera viene cargada de novedades. Tras un tiempo separados e intentando escapar de la justicia, la banda tiene que volver a reunirse para rescatar a uno de los suyos que está en peligro: Río. Aquí se impondrá la amistad al dinero y la libertad. Esta vez, el objetivo será el Banco de España.

A los atracadores que consiguieron salir de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre sanos y salvos y con el dinero a cuestas, se le suman nuevos rostros. Najwa Nimri llega para encarnar a la inspectora Alicia Sierra, encargada del caso; Hovik Keuchkerian como Bogotá; Rodrigo de la Serna para interpretar a El Ingeniero; Fernando Cayo a Tamayo y Luka Peros a Marsella. En FormulaTV queremos que recuerdes todo lo que ocurrió en las dos temporadas anteriores y por eso te ponemos al día para que disfrutes al máximo de lo nuevo de la serie con estos nueve puntos.

1 8 atracadores y 67 rehenes

Todo comenzó con ocho personas, de diferentes edades, preparándose para la mayor locura de sus vidas. Escondidos bajo un pseudónimo -todos ellos utilizan nombres de ciudades del mundo- y tras una careta de Dalí acompañada de un mono rojo, siguieron las órdenes de su superior, El Profesor, y asaltaron la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre de Madrid cuando se encontraba en plena visita. Así, Río, Tokio, Nairobi, Berlín, Oslo, Moscú, Helsinki y Denver, sembraban el pánico en su interior y se hacían con un total de sesenta y siete rehenes. Entre ellos, además de visitantes comunes, se encontraba Arturo, el director de la institución; su ayudante y amante, Mónica, y Alison Parker, la hija del embajador inglés en España. La captura de esta última la utilizan para que la noticia del atraco llegué a los medios de comunicación y para amenazar a quien se le ocurriera intentar desbaratar el plan de la banda.

2 Los romances dentro del atraco

Antes de que el plan se pusiera en marcha, El Profesor mantuvo encerrados a los atracadores para que no quedara ningún fleco suelto y nada pudiera salir mal durante el asalto. Además de directrices de actuación y de charlas psicológicas, el líder también les quiso hacer algunas advertencias que, sin lugar a dudas, pondrían en peligro el éxito del mayor atraco de la historia. "Nada de relaciones personales" fue una de ellas. El Profesor quiso que la banda se centrase en el atraco y no mezclaran la cabeza con el corazón. Pero parece que Cupido también estaba dentro de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, porque la chispa estuvo encendida desde el primer momento. Tokio y Río ya habían comenzado una especie de idilio antes de entrar, que continuó con sus más y sus menos durante los días del atraco. La distancia se metió -una de las veces- en su relación por Alison Parker, una de las rehenes que tuvo cierta tensión sexual no resuelta con Río.

Denver tampoco perdió el tiempo, y es que terminó enamorándose de Mónica Gaztambide, la rehén embarazada de Arturo. Ambos dieron rienda suelta a su amor, primero a escondidas para no entorpecer la operación y para no poner en peligro sus vidas y, al final, es descubierta por el resto de atracadores y finalmente por Berlín, que se apiada de ella y no actúa en su contra. Por último, la relación más perturbadora es la de la inspectora Raquel Murillo y El Profesor. Este se acerca a ella por interés y se presenta como Salva, que luego resulta no ser ni su verdadero nombre. Poco a poco, la policía se va enamorando de él sin saber nada de lo que esconde y El Profesor hace lo mismo sin quererlo. La desconfianza que siente ella hace que la relación se tambalee pero, finalmente, el amor triunfa y comienzan una vida juntos.

3 Los errores de El Profesor

Además de los ocho responsables del atraco a la Fábrica, alguien tenía que controlarlo todo desde fuera. Y ese era Sergio Marquina, escondido bajo El Profesor. Desde su centro de operaciones estaba pendiente de todo lo que pasaba dentro e iba dando indicaciones a Berlín. Era el verdadero jefe. Pero a veces la cosa se le iba de las manos. Primero fue con Alberto, el exmarido de Raquel que también trabaja como policía. Marquina descubrió todo lo que le había hecho a la inspectora y no tuvo más remedio que atacarle sin pensar en cómo terminaría la situación: él esposado por Alberto y sin derecho a defenderse. De esta pudo salir pero, poco antes del asalto final, cometió un error que le descubrió.

Cuando se enteró de que Ángel, el policía que había descubierto su identidad, salió del coma en el que llevaba unos días, decidió acudir al hospital a acabar con su vida. El plan parecía perfecto: hizo creer que el centro médico iba a realizar justo ese día un casting para trabajar como payaso y así llenó el hospital de decenas de personas disfrazadas, entre ellas él mismo. Cuando se dirige a la habitación descubre que la policía se ha percatado de su presencia y hace que sea un niño con su peluche el que entre en su lugar, consiguiendo así huir. Lo que él no sabía es que iba a dejarse sin limpiar un pelo de la peluca naranja en su chaqueta. Ese mismo día queda con Raquel en el bar de siempre y es aquí donde esta última ve el pelo en la americana. Enganchado a un detector de mentiras, El Profesor se somete a un interrogatorio por parte de una inspectora con una pistola al lado y confiesa absolutamente todo. Aquí queda descubierto, pero Murillo decide no detenerle.

4 La captura de Tokio por la policía

Berlín es el que manda dentro del atraco y sus órdenes deben llegar a buen puerto. En este caso, el personaje de Pedro Alonso decidió expulsar de la Fábrica a una de las suyas: Tokio. Su mala relación y el hecho de que ella se enfrentara al líder hasta el punto de querer derrocarle, hizo que este le atara encima de una especie de camilla y le lanzara a la calle, entregándole directamente a la policía que se encontraba fuera del recinto. El primer pensamiento de Tokio tras desprenderse de la ropa y las botas para demostrar que no lleva explosivos fue huir, y eso hizo. Todo iba bien hasta que Río gritó un "Tokio" con todas sus fuerzas e hizo que esta se distrajera y fuera derribada por un policía. Pero ella no se rendía. Durante uno de los traslados, cuatro personas se bajaron de una furgoneta y empezaron a pintar de negro las ventanas del furgón de la Policía Nacional y pusieron una cuenta atrás como si hubieran incrustado una bomba al mismo. Así consiguieron que los agentes salieran del vehículo y dejaran vía libre a Tokio. Vestida de policía y tras una llamada en clave de ayuda a Río, consiguió volver a entrar al lugar donde estaban sus compañeros con la ayuda de algunos de ellos y provocando daños colaterales muy graves.

5 Los problemas de Raquel Murillo

La vida sentimental de Raquel Murillo antes de ponerse patas arriba al conocer a El Profesor tampoco era muy tranquila. Si volvemos de nuevo al "no mezclar relaciones personales con las profesionales", la inspectora se saltó eso desde el primer momento. Al comienzo de su trayectoria profesional tuvo un affaire con Ángel, un subinspector del que luego se hizo muy amiga, y comenzó a salir con uno de la científica con el que se casó y tuvo una hija. Al tiempo, su marido comenzó a maltratarla tanto física como psicológicamente y esto provocó que se divorciara de él y que la custodia de su hija fuera íntegra para ella, además de una orden de alejamiento de ambas. Después de su divorcio descubre que Ángel, aún casado, siempre estuvo enamorado de ella y todavía continúa. Pero Murillo le aprecia mucho como amigo y compañero, nada más.

6 División por el Plan Chernóbil

Aunque al principio todo estaba planeado al milímetro, la incursión de la policía cada vez era más fuerte y esto puso en alerta a los atracadores. Pensando en formas para salir de la Fábrica con vida y sin ser detenidos, y teniendo en cuenta que El Profesor llevaba sin dar señales de vida casi un día, Berlín anunció el Plan Chernóbil. Ideado, como no podía ser de otra manera, por El Profesor, el líder interno del atraco comunicó a los atracadores de qué se trataba. Definiéndolo como algo "desesperado pero muy bonito", Berlín aseguró que se trataba de guardar los billetes que ya tenían impresos dentro de globos, subirse a la azotea y lanzarlos. Una vez en el aire, sacar las armas y hacerlo explotar, provocando que todo el mundo se tirara a por el dinero y así ellos mientras poder escapar. Esto nunca se llevó a cabo pero los atracadores -sobre todo Tokio y Nairobi- se rebelaron contra Berlín, quien apoyaba ese plan junto con El Profesor.

7 Dos trágicas bajas

Poco a poco, la banda de atracadores se va reduciendo. El primero que muere es Oslo. El serbio era el encargado de vigilar a los rehenes más peligrosos, que un día consiguen armas para escapar y, en un descuido, el atracador recibe un golpe en la cabeza por parte de uno de ellos que le deja en estado casi vegetal. Aunque todos quieren que este salga y se cure, Berlín lo prohíbe por órdenes de El Profesor y es el propio Helsinki el que acaba con su primo para no verle sufrir más. Mientras están los dos solos, le baja de la silla de ruedas, le ahoga con una almohada y, entre lágrimas, le cierra los ojos.

Aunque, probablemente una de las muertes que más lloramos todos fue la de Moscú. Durante la vuelta de Tokio a la Fábrica, la policía hiere al padre de Denver de gravedad y su salud empeora a pasos agigantados. Es en el penúltimo capítulo de la segunda temporada cuando pierde la vida, no sin antes confundir a Tokio con la que fue su mujer, a la que pide perdón, ni sin escuchar unas bonitas palabras de su hijo y viceversa. Aunque hablemos de dos bajas, en teoría la temporada cierra con una más: Berlín sacrifica su vida -o eso parece- por los demás. Eso parece porque en los adelantos de la tercera tanda de episodios podemos volver a verle, quizá en forma de recuerdos o de flashbacks.

8 Berlín, de líder odiado a héroe

Siguiendo con Berlín, desde el primer momento se nota que su relación con el resto de atracadores no es buena. Ellos están a su cargo dentro de la Fábrica, tienen que asumirlo y seguir sus órdenes. Entre los chicos, aunque tienen rifirrafes, se respira el buen rollo, pero cuando Berlín está presente la cosa cambia. Con la que peor se lleva hasta el final es con Tokio, que no entiende su forma de actuar.

En el último episodio, en el asalto final, cuando ya muchos de los atracadores han conseguido salir sin ser descubiertos y con la policía avanzando, Berlín decide quedarse dentro para enfrentarse a ellos aún sabiendo que perdería la vida -aunque ya le quedaba poco debido a su enfermedad degenerativa- y así permitir que el resto salgan victoriosos. Este gesto de dar su vida para proteger la de sus compañeros caló en ellos. Sobre todo en El Profesor, que hace todo lo posible -igual que Nairobi- para que abandone junto a ellos, ya que resulta ser su hermano.

9 Cambio de bando por amor

Dos de las protagonistas de las dos temporadas, que no formaban parte de la banda de atracadores, cambiaron de bando y se unieron a ellos. La primera es Mónica Gaztambide, que pasa de rehén a cómplice y después a atracadora por su amor a Denver, de quien se enamoró. La otra es Raquel, la inspectora, que acaba enamorándose de Sergio Marquina y, tras ser castigada por la policía a causa de su relación con el caso, se une a su amor en sus planes. En el mismo momento en el que Raquel descubre que Salva no es quien dice ser, en el bar, ella abre un sobre lleno de playas paradisíacas a las que quieren escapar juntos. La inspectora le pide que sea él el que escoja uno de manera aleatoria y la elegida es Palawan. Sergio le explica dónde se encuentra esa isla y al final de la temporada ella decide viajar hasta ella para reencontrarse con su amor, que está en un bar haciendo un homenaje a la primera vez que se vieron.