ADELANTO 7 DE MAYO

'La promesa' acercará a Lope y a Vera y recibirá a Santos, el hijo de Ricardo

Ricardo parará los pies a Petra cuando esta intente malmeter contra Pía.

RTVE

Por Toño García Rodríguez El 6 de Mayo 2024 | 18:27

En el último capítulo de 'La promesa', emitido el lunes 6 de mayo, la relación de Pelayo y Catalina continuaba atravesando baches, hasta que el conde descubrió la trampa que habían tendido a la hija del marqués. Mientras, Lope vivió una seria crisis, pues al no lograr remontar tras su ruptura con Vera, el nivel de sus platos bajó considerablemente. Por su parte, Virtudes consiguió integrarse bien en el palacio, aunque esto no evitó que Simona, su madre, siguiese preocupada por ella.

Por otro lado, Alonso, el marqués, trató de cumplir con la petición de la marquesa de echar a Ayala de La Promesa. Sin embargo, la reacción del conde fue tan inesperada como humillante. Además, ante la tensión latente entre Jana y Manuel, Blanca Palomar decidió intervenir con una idea que, en un principio, podría no gustar demasiado precisamente a la pareja.

'La promesa'

¿Que pasará el miércoles?

En el capítulo 350 de 'La promesa', que se emitirá el martes 7 de mayo en la tarde de La 1, Lorenzo descubrirá que Pelayo ha escuchado su conversación con el supuesto comprador. Pese a las amenazas del capitán, el conde contará la verdad a Catalina. Alonso, que se mantiene furioso con Ayala, acordará con el resto que deben apaciguar las cosas, aunque Martina no se mostrará muy dispuesta a ello. Candela, por su parte, no logrará que Virtudes le cuente la verdad y, por ello, Simona la confrontará abiertamente. Saben que no visitó a Antoñito y tratará de encontrar la verdad.

Y precisamente la verdad sobre la procedencia del dinero es lo que le confesará Vera a María Fernández. Y parece que su reconciliación con Lope estará más cerca que nunca. Diego seguirá sin mejorar y Petra hará todo lo posible para malmeter contra Pía, hasta que Ricardo le pare los pies. A La Promesa llegará Santos, el nuevo lacayo, hijo de Ricardo, con el que no se llevará del todo bien. Por último, Jana y Manuel, aunque parecen dispuestos a acercar posturas, no sabrán ni siquiera qué decirse para lograrlo.