'La promesa' truncará cruelmente los planes de Candela y distanciará a Manuel de Jimena

'La promesa' vuelve a reducir su presencia en las parrillas de La 1 para dar cabida al fútbol, pero eso no significa que las tramas de la semana vayan a pisar el freno. El lunes 23 de octubre se ha terminado de gestar la marcha de Candela, que ha ultimado los preparativos para mudarse a Gijón junto a su amado Carlos. Como ha venido haciendo hasta ahora, la cocinera ha mantenido oculto su traslado a sus compañeros, con la excepción de Simona, que sigue siendo su única confidente.

Las mentiras también han jugado un rol muy importante entre Abel y Jana, ya que el doctor se ha ganado una mayor empatía de la doncella al fingir que se encuentra muy afectado por el reciente malogro del embarazo de Jimena. A su vez, Manuel ha intentado despejar su cabeza de ese hecho traumático, y se ha fijado el objetivo de encontrar a Ramona. Además, Feliciano ha sido vital para que el primer envío de las mermeladas de Catalina y Pelayo a Madrid pueda ser una realidad, ya que, pese a la intervención de Petra, tomó las medidas necesarias para que todo saliera adelante... aunque la marquesa nunca se rinda en sus esfuerzos.

¿Qué pasará el martes?

El episodio 216 de 'La promesa', que se emitirá el martes 24 de octubre en La 1, romperá el corazón de Candela sin paliativos. A través de una carta, Carlos plantará a la cocinera y se marchará a Gijón por su cuenta, lo cual la deja en una situación muy incómoda. Su historia de amor ha terminado, al menos por el momento. También dañada, aunque no de muerte, está la relación entre Manuel y Jimena, que se enfriará aún más cuando él encuentre una nueva ilusión de vivir. Ante este distanciamiento, su esposa fingirá una nueva recaída.

Mientras los diferentes amores se acercan y alejan, las conspiraciones de la marquesa pasarán por un momento determinante: el objetivo de impedir que Margarita se apodere del 25% de La Promesa está a su alcance, pero Catalina frustrará ese complot. Una vez más, Lorenzo estará en el punto de mira y tendrá que ingeniárselas para encontrar otra manera de evitar el traspaso. Por último, Pía tratará de recuperar la normalidad tras dejar a Diego en casa de Beni, y su primer paso será enterrar el hacha de guerra con Petra, aunque no será precisamente sencillo.