Los cuartos Asaltos de 'La Voz' se emitieron en la noche del martes 26 de febrero, en esta ocasión con los enfrentamientos entre miembros del equipo de Pablo López y de Paulina Rubio. Una fase del concurso en el que, de nuevo, hubo concursantes descartados de cada uno de los grupos, mientras algunos de sus compañeros pasaban a la fase final. Eso fue lo que ocurrió con Sandra y Keila, del equipo del malagueño, y con Jesús, Onelia y Aitor, del equipo de la mexicana.
Sandra y Keila, concursantes eliminadas en los cuartos Asaltos de 'La Voz'
"Me voy con muchos amigos, contenta, satisfecha con lo que he hecho", confesó Keila, tras despedirse de los coaches y de Andrés, Paloma y Álvaro, compañeros del equipo que continuaban hacia la fase final del concurso. La concursante se subió al escenario con su chelo una vez más tras conseguir que los cuatro coaches se girasen en las audiciones a ciegas, pero desgraciadamente no logró ser una de las elegidas para la fase final.
"Estoy contenta por los que han pasado. Nos hemos hecho como muy familia en el poco tiempo que hemos estado juntos", declaró por su parte su compañera Sandra. "Me siento como que he estado todo el programa en un bordillo, entre ir hacia delante o hacia atrás, y al final me he caído para atrás", reconoció la concursante, a raíz de la decisión de los coaches de elegirla para una segunda oportunidad durante las audiciones a ciegas.
La despedida de Jesús, Onelia y Aitor
Jesús, Onelia y Aitor, concursantes eliminados en los cuartos Asaltos de 'La Voz'
Al concluir los Asaltos del equipo de Paulina, la sensación de la coach y su compañero Antonio José fue algo más amarga, puesto que ellos mismos eran los únicos a los que les quedaba un solo robo. Una mecánica por la que solo dos de sus cinco concursantes pudieron pasar a la Batalla Final. "Me encantaría grabar un tema contigo", reconoció Paulina, abrazando a Jesús, uno de los concursantes eliminados.
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"Todos éramos muy buenos y es lo que he dicho: podía pasar cualquiera", reconoció el concursante, en su despedida. "Es una mezcla de muchas cosas, me voy triste, contenta, agradecida. He disfrutado todo", declaró por su parte Onelia, quien no pudo contener algunas de sus lágrimas al abandonar el plató. Aitor, por su parte, también admitió sentirse apenado por su partida, algo que sin embargo no le hizo perder el optimismo. "Me da pena marcharme, pero soy consciente de que son vientos de cambio y surgirán oportunidades en otra parte", concluyó el sevillano.