ENTREVISTA

Lara Álvarez: "Estoy en un momento de mi vida en el que tengo ilusión, ganas de probar y de responsabilizarme"

'Pesadilla en El Paraíso' comienza su andadura en Telecinco el jueves 8 de septiembre con famosos en una granja.

Mediaset España

Por Fernando S. Palenzuela El 8 de Septiembre 2022 | 11:59

Lara Álvarez iba a asumir, por primera vez, el rol de presentadora titular de una gala en solitario. Sin embargo, y pese a haberse anunciado así desde que se confirmara que se estaba trabajando en 'Pesadilla en El Paraíso', Telecinco decidió reformular en tan solo 24 horas la estrategia planteada. De este modo, el estreno del reality show de Fremantle contará con una gala en directo presentada por Carlos Sobera donde, de este modo, la asturiana vuelve a ejercer la función de presentadora guía de los concursantes como ocurre en 'Supervivientes'.

Esta entrevista a Lara Álvarez se realizó tan solo unas pocas horas antes de que Mediaset España diera a conocer su cambio de planes. De este modo, varias de las preguntas versan sobre la oportunidad que el grupo de comunicación le había dado a uno de sus rostros más queridos por el público para asumir ella sola la conducción de un prime time. Sin embargo, y dado que no se nos avisó de este cambio cuando preparamos la entrevista, hemos decidido dejarla tal cual se había concebido en su origen.

Carlos Sobera y Lara Álvarez, presentadores de 'Pesadilla en El Paraíso'

¿Cómo afrontas el encargo de ser la presentadora principal del formato?

Muy ilusionada, asumiendo la responsabilidad que corresponde. Además de las galas semanales de los jueves, vamos a hacer tres access: los lunes, martes y miércoles. Los espectadores van a poder ver material inédito todos los días, con unas pruebas que van a ser fundamentales para el transcurso del programa. En la gala de los jueves veremos la expulsión en el Duelo Final, en el Consejo, además de otras sorpresas que no puedo desvelar todavía. Los domingos estará Carlos Sobera en directo con el Debate. Para mí es un paso importantísimo, me lo tomo con la responsabilidad que corresponde y con muchísima ilusión. No te imaginas lo bien que me lo estoy pasando, rodeada de animales, de naturaleza y de nuestros 16 famosos que lo están dando todo desde el minuto uno. Y del equipazo de Fremantle que está trabajando de sol a sol para que la acogida de los espectadores sea como lo estamos viviendo nosotros, con esa ilusión.

¿Los concursantes eran conscientes de a lo que iban o alguno se ha sorprendido?

Los concursantes venían con unas expectativas y unas intenciones muy claras, pero la realidad siempre supera cualquier intención que tengas. El arranque del programa va a ser espectacular porque ellos ya están pasados por agua, llegan ya en unas condiciones en las que alguno de ellos desde el primer momento se enfrenta ya a su peor pesadilla. El lugar donde están ellos, la misma granja, es un auténtico paraíso. Estamos en la Sierra de Cádiz que es espectacular, rodeados de árboles. Van a tener la granja, pero cada estancia se va a ir abriendo a medida que ellos se vayan involucrando en el trabajo. Ellos sí tenían la intención de venir a darlo todo, pero es que lo tienen que dar todo, y lo están descubriendo ahora.

Se han sorprendido todos. Es verdad que hay gente que está más conectada al campo que otra. Hay gente que ha venido incluso con miedo a ciertos animales o ciertas situaciones que se están encontrando de frente. Lo único que puedo dar como pista es que ninguno se ha echado atrás. Aquí todos están descubriendo que la palabra "no puedo" no existe y tienen que superar las pruebas que les van a abrir la posibilidad de vivir cada día mejor en el Paraíso.

Ellos han llegado y las condiciones son básicas. Incluso la despensa, cuando la vea el espectador, da pena. Tienen cuatro o cinco ingredientes básicos con los que, o eres creativo de la cocina, o poca cosa puedes sacar de ahí. El huerto está clausurado, solo lo van a poder abrir a medida que vayan superando las pruebas semanales con el Guardés, que es Antonio. Los animales, por supuesto, solo pueden cuidarlos. No pueden ordeñar, no tienen ni vacas todavía, no pueden sacar huevos... Nada más que proteger y cuidar a esos animales. Encima en unos camastros sin colchón, durísimos... Han llegado y se les ha cambiado la cara, pero han reaccionado rápidamente y se han puesto manos a la obra, que es lo importante.

Con 'Pesadilla en el Paraíso' vais a poner en práctica una mecánica que nunca antes se ha visto. Es muy novedoso el hecho de no tener que votar para salvar o expulsar. ¿Cómo creéis que va a funcionar esa nueva mecánica?

Es una mecánica relativamente nueva en España. Los realities grabados están funcionando muy bien en el resto del mundo. Esto es, de hecho, una adaptación de un programa que está funcionando como un cohete en otros países. Lo que va a hacer que se enganche el espectador es que, aunque esté grabado, tenemos reality vivo, puro y duro. Cada programa está prácticamente pasando en el momento, no es un formato enlatado. Mientras los concursantes están en la granja, el espectador está viendo lo que está pasando en la granja. No es que estén ya todos fuera haciendo su vida, sino que siguen aquí y el reality está vivo. Vamos a ver un programa cada día contando lo que pasa, no en directo, pero solo en unos días.

Lara Álvarez presenta 'Pesadilla en El Paraíso'

Por otro lado, la mecánica de que sean los propios concursantes a través de las pruebas y el papel del Capataz, fundamental en esta dinámica porque elige a través de sus votos a sus favoritos en cuanto a los inmunes, y a los nominados, todo esto está generando unas tramas dentro de la casa que no genera muchas veces la votación de los espectadores. Los propios protagonistas se encuentran en una convivencia directamente afectados por ellos mismos. Eso abre unas posibilidades infinitas a que salte todo el rato la diversidad entre las personalidades que tenemos en la casa. Donde había amigos hay una nominación de repente y salta el conflicto, donde veías conflictos salta la inmunidad y de repente se hacen amigos... Es un no saber qué pasará permanentemente y sobre todo influye el juicio de ellos mismos, que son los principales involucrados en cómo se van desarrollando sus labores en la granja. Me parece que va a ser muy bien acogido porque tiene todo el sentido del mundo este sistema de votación y cuando el espectador lo vea va a entender por qué.

Al final es la mecánica de la propia convivencia y el "oye, si no vamos todos a una, con tu trabajo y tus nominaciones tú me estás afectando directamente a mí. La importancia de las pruebas reside precisamente en esto. Como Capataz, puedes elegir a tus favoritos, pero luego esos favoritos se tienen que batir en pruebas que son tela marinera. Luego los jueves tenemos el gran Duelo Final, la última prueba en la que los concursantes se ven las caras y entre ellos va a salir el expulsado definitivo. Está todo pensado para que el hilo conductor es el trabajo, el esfuerzo, la implicación y, entre ellos, el juicio. En cuanto a la votación, es más que justa porque son los propios protagonistas los que se van a ver afectados por ellos mismos.

Ya que el reality está vivo y se sigue desarrollando mientras se emite, ¿habéis pensado en darle al espectador cierto poder para que influya en el concurso como se ha hecho en 'Supervivientes'?

Desde que trabajo en Mediaset he descubierto que hacemos una televisión viva. Siempre está la posibilidad de adaptarse a lo que el formato requiere en cuanto a la petición muchas veces de los espectadores. Lo que nos permite este tipo de formato ahora mismo es que, al no estar terminado, todas las adaptaciones son posibles. Lo bueno es la sensación de televisión viva, tener los debates que también son en directo, donde por supuesto el espectador va a tener una interacción directa. Vamos a tener también el desglose de todos los colaboradores que, con Carlos, van a comentar lo que va pasando durante la semana. La mecánica de cómo va a interactuar el espectador se irá explicando a lo largo del formato.

No estamos haciendo un reality grabado al uso, es la mezcla de las dos cosas, que puede resultar una fusión muy interesante. Al estar grabado cierto contenido, le das al espectador el caviar del reality y, por otro lado, la posibilidad de adaptación de la televisión viva que estamos haciendo nos permite cubrir las necesidades o modificaciones que sean pertinentes. Yo creo que es una bomba.

¿Por qué crees que ahora la tendencia de los realities está yendo hacia aquellos grabados que al vivo?

El reality grabado te permite ser más selectivo a la hora de contar una historia de 24 horas de concursantes que tienes de sol a sol en una granja. En la exclusividad muchas veces está el potencial de enganchar al espectador, de saber que lo que estás viendo es lo mejor. Yo entiendo la necesidad de ver in situ lo que ocurre, que es lo que nos da las pruebas, pero donde ves el desarrollo de los concursantes y de las personalidades es en lo que ocurre en el reality, dentro de la granja. La capacidad de poder ser selectivo a la hora de ofrecer al espectador ese contenido más exclusivo y que pueda también programar lo que quiere ver, me parece el reality a la carta, esa televisión que estamos adaptando permanentemente.

Ahora que vas a tener el cargo de presentadora de galas, además tú sola, ¿te ves haciendo ese sonado cambio de roles que tantas veces se ha mencionado sobre 'Supervivientes' y marcharte tú a Madrid y que alguno de tus compañeros se vaya para Honduras?

Yo ahora mismo me veo haciendo de todo. Profesionalmente estoy en un momento de mi vida en el que tengo ilusión y ganas de probar, de divertirme, también de responsabilizarme... No hay miedo, hay aprendizaje, ganas e ilusión. Si tú me dices aquí, pues aquí. ¿Allí? Allí. Está todo bien, no me cierro a nada.