ESPECIAL

Las claves de 'Madre': Así es la gran apuesta turca de Nova sobre el maltrato infantil

La telenovela, protagonizada por Cansu Dere y Beren Gökyildiz, cuenta la historia de una niña criada en un entorno de maltrato que acaba conquistando el corazón de su profesora.

Por Beatriz Prieto El 24 de Marzo 2019 | 09:00

Atresmedia y Nova continúan sumando producciones turcas a su lista de emisiones. La última es 'Madre' ('Anne' en turco), una telenovela protagonizada por Cansu Dere, actriz de 'Sila', y la pequeña Beren Gökyildiz, cuyos personajes, Zeynep y Melek, acaban unidos por la casualidad. Una relación que acaba yendo más allá de profesora-alumna, hasta el punto de quererse como madre e hija, mientras ambas tienen que enfrentar sus propios problemas. Una producción que aterriza en la cadena el domingo 24 de marzo a las 22:00h.

Beren Gökyildiz y Cansu Dere como Melek y Zeynep en 'Madre'

El argumento de una profesora que acaba queriendo a una de sus alumnas como si fuera su propia hija puede resultar familiar: después de todo, a muchos nos suena la historia de "Matilda". Sin embargo, más allá de ese punto y de la indiferencia de Sule, madre de Melek, hacia su propia hija, la historia de 'Madre' se recrudece: la pequeña ha de convivir con la pareja de su progenitora, un hombre que no siente ningún aprecio hacia ella y que la maltrata. Un crudo y duro entorno que, sin embargo, no consigue empañar la dulzura de la protagonista.

'Madre' se estrenó en 2016 en Turquía y, desde entonces, ha llegado a más de 30 países, tanto en Europa como en Latinoamérica, donde cosechó grandes datos de audiencia. Adaptación de 'Mother', exitosa serie dramática japonesa de Yuji Sakamoto, supuso el regreso de Cansu Dere a la televisión tras un largo período de descanso. Además, fue la primera vez que Beren Gökyildiz ejerció de protagonista en televisión. Un papel gracias al que consiguió grandes alabanzas y varios premios. Antes de su estreno en España, en FormulaTV hemos recopilado algunas de las claves por las que merece la pena disfrutarla.

1 Melek, pura inocencia en un entorno cruel

Beren Gökyildiz como Melek en 'Madre'

Sin duda Beren Gökyildiz, en su papel protagonista como la pequeña Melek, es la primera que llama la atención cuando uno ve 'Madre'. Su interpretación no resulta forzada ni sobreactuada, sino que es de lo más convincente a pesar de que tenía solo siete años de edad cuando se rodó la telenovela. Melek es todo dulzura e inocencia desde el minuto uno, ambas facetas mezcladas con una cierta sabiduría que una niña tan pequeña no debería poseer.

A pesar de vivir en una casa con un ambiente hostil, en el que su madre Sule la desprecia mientras su padrastro busca cualquier excusa para humillarla y pegarla, Melek es una niña que conquista desde la primera escena. Su desenvoltura, su franqueza y sus comentarios hacen que uno la coja cariño de inmediato, y más teniendo en cuenta el sufrimiento que debe soportar.

Gracias a estas admirables características, no resulta sorprendente que logre conquistar a alguien en apariencia tan dura y seria como Zeynep, hasta el punto de que ella acaba deseando convertirse en su madre al descubrir la verdad sobre el hostil entorno familiar en el que vive Melek. Una pareja perfecta para la joven profesora, que genera una gran química entre las dos con la que logran alcanzar al espectador.

2 Zeynep, una mujer solitaria con muchos secretos

Cansu Dere como Zeynep en 'Madre'

El papel de Cansu Dere como la profesora Zeynep pasa un tanto desapercibido al principio, cuando Melek absorbe toda la atención. La docente se muestra algo dura y distante, especialmente con los niños, de los que admite que "no le gustan mucho". Una característica que no hace sencillo que capte al espectador. Parece una mujer hermética que, sin embargo, va abriéndose poco a poco, en un proceso en el que se acaba ganando al espectador.

El primer encuentro de Zeynep y Melek resulta de lo más chocante, incluso triste, tanto para el espectador como para la profesora. Zeynep llega como suplente ante la baja de la maestra habitual de la clase y se topa con una niña sincera que no duda en manifestar sus a veces demasiado inquietantes pensamientos a pesar de su temprana edad. Una faceta de Melek que enseguida se queda en la memoria de Zeynep, que ya no podrá alejarse de ella a medida que se estrecha su relación, y se acabará convirtiendo en su más fiel compañía y defensora.

Otro de los puntos de interés que genera Zeynep, más allá de su relación con la pequeña Melek, es su entorno familiar. Enseguida queda claro que la relación con su madre adoptiva y sus hermanas es prácticamente nula. El rencor hacia la primera es evidente, especialmente cuando habla del tema con una curiosa e inocente Melek, lo que genera la necesidad de conocer la raíz de esa pésima relación. Además, la aparición de su madre biológica también da pie a que el espectador desee conocer qué ocurre realmente en esa familia y qué secretos ocultan.

3 Un comienzo difícil que engancha

La pequeña Melek llorando en 'Madre'

La empatía que genera Melek con cada escena, buena o mala, y el papel cada vez más importante de Zeynep en su vida, manifestando cada vez más ese deseo de cuidarla, de protegerla, son dos factores muy atrayentes a la hora de disfrutar de la ficción. Algo que, junto a la huida de ambas una vez que Zeynep descubre la verdad sobre la madre de Melek y su pareja, genera una cierta esperanza en que la situación mejore para la niña.

Al principio también resultan intrigantes las cosas que podrían salir mal en torno a ambas protagonistas o cómo se desarrollará su vida juntas como familia y lejos de su antiguo hogar. Dos incógnitas esenciales que animan al espectador a seguir disfrutando de la producción, con el propósito de descubrir qué ocurrirá a continuación y si todo acabará tan bien como uno suele esperar en el género de las telenovelas. Y tratándose de una ficción turca en torno a un tema tan serio como el maltrato infantil, no es algo tan seguro.

La vida de Melek es un cúmulo de contrastes que se plasman en la trama de 'Madre': su amabilidad, cariño e inocencia se contraponen con el carácter agresivo de su padrastro y el pasotismo de su madre. Eso genera una serie de escenas que varían en esos mismos aspectos: podemos encontrar un tierno momento entre Zeynep y Melek, mientras se van conociendo, y al instante siguiente ser testigos del sufrimiento de la niña entre las paredes de su casa, a manos de su padrastro.

En este encadenamiento de sucesos contrapuestos, es bastante complicado para el espectador permanecer indiferente a la historia. La atmósfera que crea 'Madre' con cada momento, con cada interacción de Melek con la gente de su entorno, con cada decisión de Zeynep, consigue resultar tan convincente que es sencillo sumergirse de lleno en la trama, sentirse conmovido, incluso, perder la noción del tiempo.