Laura Manzanedo: "'Al salir de clase' convirtió en bisexual mi personaje para no despedirme por la homofobia"

Actriz, bailarina, concursante de realities, colaboradora de televisión y hasta locutora de radio. Laura Manzanedo ha probado todos los palos posibles. Ha destacado como actriz desde su papel en 'Al salir de clase' entre 1997 y 2001, pasando por 'El auténtico Rodrigo Leal' y 'Yo soy Bea'. En su salto fuera de la ficción, se la pudo ver en realities como la pionera 'Selva de los famosos' o '¡Mira quién salta!', sin perder de vista su divulgación desinhibida sobre sexualidad en programas como 'El sexómetro', 'Condició Femenina' o "Ponte a prueba".

Retirada de los medios en los tiempos recientes y disfrutando de la tranquilidad en una casa de campo en Francia, repasamos la amplia y variada trayectoria de la comunicadora multidisciplinar, cómo ha roto continuamente tabúes sin despeinarse y las polémicas y tropiezos en los que se ha visto envuelta, como el acoso laboral o el rechazo de la audiencia conservadora.

Me insultaban por la calle y muchos padres se quejaron por que interpretara a una lesbiana

¿Cómo fue entrar en 'Al salir de clase'?

Venía de hacer una serie con Félix Sabroso llamada 'Quítate tu pa´ponerme yo' que fueron unos pocos capítulos para verano y ya me dieron la gran noticia de que se estaba haciendo una nueva serie juvenil. Hice el casting y me quedé con Clara, que era el personaje lésbico, y me encantó la idea de ser la primera y poder representar a un colectivo que hacía 25 años no estaba presente en la ficción española. Sin embargo, el público reaccionó mal, me insultaban por la calle y muchas asociaciones de padres se quejaron de mi trama, así que la productora, para no perderme como actriz, decidió que Clara era bisexual. Fue un cambio brutal en mi vida, un boom, un fenómeno, nos hicimos famosos en un pis pas.

¿Qué te aportó 'Al salir de clase'?

La popularidad, conocerla y vivirla para bien o para mal. Al principio me cohibí pero un día dije "hasta aquí" y entonces me empezó a dar igual lo que pensase la gente. Me convertí en una persona descarada.

¿Te gustaría participar en un reencuentro de actores de 'ASDC' por sus 25 años?

Me encantaría. Además, hace mucho tiempo que no les veo.

¿Con quién te llevabas mejor?

Con Athenea Mata, Olivia Molina y Carmen Morales. Viví etapas muy importantes de mi vida con ellas.

¿Qué ha supuesto para ti ser la actriz que más capítulos ha realizado en 'ASDC'?

Al estar en la serie tres años y medio he tenido el privilegio de coincidir con prácticamente todo el elenco. Al principio entré con un personaje secundario. No iban a poner a una lesbiana como protagonista ni para atrás. Mi personaje entraba para una trama de 15 días en la que se enamoraba de Miriam, pero en ese momento yo era la única de todos que estaba licenciada y ya tenía unas tablas y una seguridad que el director no quiso perder. Desde entonces me cambiaron el personaje, me sacaron muchos novios, tuve muchos besos y muchos morreos en los que no hubo problema alguno. Yo siempre lo dije, me gustaba más la Clara del principio.

Tras haber hecho un personaje episódico en 'Un paso adelante', ¿te gustaría participar en 'UPA Next'?

Me encantó 'Un paso adelante', estaba Miguel Ángel Muñoz, que ya lo conocía de 'Al Salir de Clase' y fue estupenda la trama con Pablo, en la propia serie éramos actores y nuestros personajes se liaban. Todos los actores eran súper majos, fueron pocos capítulos pero era una serie súper divertida que recuerdo con mucho cariño.

Sabía que iba a entrar en el reality e iba a ser el final de mi carrera como actriz

Fuiste la primera actriz reconocida en participar en un reality de supervivencia. ¿Por qué accediste a concursar y cómo valoras tu paso por 'La selva de los famosos'?

Después de mi único protagonista en cine no me salió trabajo, realmente entré en la selva por dinero y sabía que iba a entrar en el reality e iba a ser el final de mi carrera como actriz. En realidad, me apetecía un huevo ir a la selva, hice un programa estupendo y no gané porque me enfrenté al líder que era Canales. Si no, habría ganado.

Entonces, ¿te ha traído consecuencias concursar en el reality?

Claro, cuando salí de firmar el contrato para ir a la selva me llamaron para hacer un personaje fijo en 'El comisario' y no lo pude grabar, por eso ya me cancelaron. Se tomaron a mal que les rechazase, cuando no fue así, simplemente acababa de firmar otro proyecto.

Además de en 'La selva de los famosos' te vimos en televisión saltando de un trampolín. ¿Te verías en un tercer reality?

'¡Mira quién salta!' fue una paliza, mucho más duro de lo que se ve en la tele por la cantidad de horas de entreno, la experiencia fue muy buena pero ya no podía más con ese olor a cloro, ese verano no salí del mar para compensar. Me gustaría participar en un reality que supusiera un reto, pero creo que no volvería a una convivencia cerrada en una isla ni loca. Eso sí, me gusta ver y comentar todos los realities, analizo mucho el comportamiento de los participantes.

En '¡Mira quién salta!' no llegaste tan lejos como en 'La selva de los famosos', ¿te veías ganadora?

Bueno, es televisión y era más un show que una prueba deportiva, por lo que la valoración de los saltos era muy subjetiva. A veces contaba la coreografía y otras veces no. Pero sí me veía con posibilidades de ganar, fui muy curranta y tengo mucha preparación física. La gente fue divina, hice amistades y algunos nos vimos fuera del programa como Belén Rodríguez, Leo Cámara o Sandro Rey.

Me he tirado a hombres de todas las razas. Me faltan esquimales, creo

Has participado en programas como 'El sexómetro', 'Condició Femenina' o 'Hable con ellas' hablando abiertamente de sexo, ¿Qué le queda por hacer a Laura Manzanedo en este terreno?

Me he tirado a hombres de todas las razas. Me faltan esquimales, creo. No me gustan los tríos pero los he hecho por experimentar, por cultura.

¿Cómo has vivido esos momentos en los que no suena el teléfono para ofrecerte ningún proyecto?

Me acuerdo que después de 'Yo soy Bea' me tuve que enfrentar a trabajar en el mundo de la noche y ser la famosa que estaba con 32 años llevando la lista de invitados de una discoteca. A pesar de que iba disfrazada de arriba abajo, me preguntaban si era Laura Manzanedo. Sí, era Laura Manzanedo en su época pobre.

Has sido portada de Interviú tres veces y has salido en numerosos robados de la revista. ¿Por qué accediste a realizar el primer posado y cómo fue acogida la idea en tu familia?

Recuerdo que hacer la primera sesión fue complicada. Salieron unas fotos divinas, pero todavía no estaba suelta posando con el fotógrafo. Mi reportaje favorito fue el segundo por las calles de Malasaña. Posar y que encima te saquen unas fotos estupendas es para mí un regalo, no sé cómo hay gente que puede estar en contra. He tenido la suerte de que a mis padres, aunque son gente inteligente y culta, les he abierto la mente en numerosas veces y siempre han sido un apoyo.

"Ponte a prueba" fue un programa en el que se hablaba abiertamente de sexualidad y de derechos sociales. ¿Qué tipo de llamadas eran las que más te impactaban? ¿Por qué crees que son importantes programas como este?

He escuchado casos en "Ponte a prueba" brutales, me acuerdo de un muchacho que nos llamó desde la calle en pleno invierno porque le había dicho a su madre que era gay. Decía: "Mamá, no soy culpable de lo que soy". Estos programas hacen una labor social fuera del show y del espectáculo.

Una parte importante de los oyentes de "Ponte a prueba" era público adolescente. ¿Crees que encontraban en el programa la educación sexual que en ocasiones podían no tener en las aulas?

Seguramente. Nosotros realizábamos un trabajo educativo fuera del espectáculo radiofónico. En las aulas se debería romper con todo. ¿De qué me sirve a mí aprenderme todos los animales de los parques naturales de España en vez de conocer una realidad social como pueden ser las familias con dos madres? Con esto se crea gente que no se plantea nada.

¿Ha surgido alguna amistad o algún lío con algún oyente que llamase al programa?

Amistad a raíz de una llamada no, sí a través de redes sociales. Lo que sí me pasó es que al tener la capacidad de empatizar con el oyente, a veces después del programa me quedaba enganchada a las historias por mi hipersensibilidad, me llevaba las historias a casa. Sí que he seguido a veces el proceso del algún oyente que después ha necesitado mi ayuda, no me podría reprimir.

En 'Ponte a prueba' me hicieron un mobbing brutal

Después de 7 años, "Ponte a prueba" terminó para ti de un día para otro con un despido. ¿Cuáles fueron los motivos?

No es cierto, como se dice, que acudiera tarde al trabajo, eso es más que demostrable. Esa gente me estaba haciendo un mobbing brutal. Le dio una lipotimia a mi madre por escuchar que a su hija la iban a echar en directo, y ese día tuve que llevarla al hospital y me dejé el móvil en casa, faltando por primera vez a mi trabajo. Lo aprovecharon para difamarme en directo en lugar de cubrir a un compañero. Fue un abuso. Lo más satisfactorio fue el reconocimiento de los oyentes.

Si se volviera a hacer y te lo propusieran, ¿regresarías a "Ponte a Prueba"?

No sé si volvería a "Ponte a prueba", creo que ya tuvo su momento. Pero sí volvería a la radio, echo de menos el contacto que se genera con los oyentes.

De pequeña era creyente hasta que en una clase de religión hablaron en contra de la masturbación

Cuando pasaste de trabajar como actriz a ser locutora y colaboradora de televisión, ¿tuviste miedo a perder intimidad?

Para nada. Aunque no soy perfecta no tengo nada que ocultar y en la radio era completamente transparente. En una etapa del "Ponte" llegué a chocar con las compañeras más conservadoras. Yo me toco desde los seis años. De hecho, de pequeña era creyente hasta que en una clase de religión hablaron en contra de la masturbación, algo que yo llevaba haciendo 8 años de mi vida, y rompí totalmente con aquello. Nunca me dio pudor contar estas anécdotas personales en antena.

¿Cómo ha sido tu vida en los últimos años retirada de los medios?

Cuando terminó la radio y me quedé con una mano delante y otra detrás, me salió un trabajo como coreógrafa en Francia, porque también soy bailarina, y me tuve que ir del país. Ahora me he sacado el máster para ser profesora de español en Francia y estoy encantada en mi casa en el campo.

Tras tus apariciones televisivas de este año, ha habido comentarios en RRSS a favor de tus declaraciones y varias en contra. ¿Cómo gestionas estas críticas?

Un discurso tan alejado de toda frivolidad tiene que escucharse detenidamente para no ser fácilmente malinterpretado, lo que no pudo ser por falta de tiempo. Estoy muy agradecida al 'Deluxe' por el trato tan estupendo y a la audiencia por su cariño, apoyo e incluso disconformidad.

La televisión necesita a personas que no tengan ningún tabú para hablar de todo tipo de temas

¿Crees que la televisión se olvida de las mujeres cuando sobrepasan cierta edad?

Lo que sé es que la televisión necesita a personas que no tengan ningún tabú para hablar de todo tipo de temas. Hay poca gente que con 46 años no sea madre, sea una tía tan fiestera, viajera e investigadora como yo y que también tenga su parte cultural. Es decir, que disponga de lo académico y de lo callejero.

¿Te gustaría volver a tener un proyecto en televisión?

Me encantaría, echo de menos ayudar a la gente desde la comedia porque es mi vocación. Mi pasión es comunicar.

¿A qué te hubieras dedicado si no hubieras elegido el camino de actriz?

Siempre he querido ser actriz, pero empecé a bailar muy joven, con 8 años. Me llamaba el teatro, es algo que siempre he tenido muy claro, necesitaba comunicar. Quería ser actriz y misionera y esa parte de compromiso social la he podido cumplir en algunos trabajos. Al final he tocado todos los palos y he sido también locutora, comentarista, presentadora, reportera y profesora. La vida me ha hecho ir reinventándome.

Me encanta que me sigan recordando por 'Al salir de clase' y que me digan que estoy igual

De todos los formatos que has realizado, ¿cuál ha sido el proyecto que más has disfrutado?

No podría quedarme con uno. Fue estupenda la época en la radio en la que realizábamos los tours y las giras en los que conocíamos a los oyentes. Se creaba una relación muy profunda y en estos encuentros descubrías a gente con la que ya habías hablado en redes sociales. También cuando he trabajado de reportera, el contacto con la gente y la improvisación me flipan. Pero en mi faceta como actriz me quedo con 'Al Salir de clase'. Me encanta que me sigan recordando por la serie y que me digan que estoy igual, eso sí que es quererme y verme con buenos ojos.