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Una de las parejas más importantes de las ficciones que se emiten en nuestro país ha terminado para siempre. "Luimelia", el nombre con el que popularmente se conoce a la relación que mantienen en 'Amar es para siempre' Luisita (Paula Usero) y Amelia (Carol Rovira), ha roto definitivamente... o al menos eso ha dicho la primera. Tras varios episodios en los que se han alejado y reencontrado en diversas ocasiones, ha llegado el temido momento por muchos: Luisita no ha aguantado más y ha decidido terminar con todo y es que pese a que tiene claro que Amelia es el amor de su vida, sabe que no puede seguir con ella, por eso ha optado por ser drástica y romper definitivamente con ella. Y sí, eso sin duda ha provocado un revuelo absoluto entre los fans, que están totalmente consternados con este giro de trama.
Amelia y Luisita, derrumbadas en 'Amar es para siempre'
Así ha sido la dramática ruptura
Entre lágrimas, ambas se han encontrado en la plaza que frecuentan para hablar de lo que tienen y sí, romper... ¿para siempre? "Creo que sabes de sobra que eres el amor de mi vida, y que nunca había querido a nadie como te quiero a ti, pero no puedo más", le empezaba diciendo Luisita, totalmente derrumbada. "Se acabó para siempre, no puedo más, así que esto se termina para siempre", seguía, mientras Amelia le decía que "estás sacando las cosas de quicio" y le pedía que le "castigase" si quería, pero que no le dejase: "Estoy dispuesta a hacer lo que quieras".
Pero Luisita no estaba dispuesta a ceder y sí, se lo dejó muy claro: "En la vida quieres unas cosas y yo quiero otras y son incompatibles, no podemos estar juntas". Era entones cuando Amelia le decía que estaba dispuesto a dejar su trabajo si con ello conseguía que le perdonase, pero no, Luisita optaba por no ceder ni una vez más. "No lo estás entendiendo, se acabó. Lo único que quiero es que tú seas feliz y yo quiero serlo también, pero contigo no lo soy. No puedo estar toda la vida persiguiéndote, sufriendo", le dijo la chica, para terminar de una vez por todas con ella: "No me lo pongas más difícil, te lo pido por favor. Sé acabó, acéptalo y déjame marchar". Era entonces cuando se alejaba del lugar y dejaba a Amelia sola, desconsolada y totalmente rota.