Nuevo capítulo en la guerra abierta entre Luis Rubiales y RTVE. El presidente de Federación Española de Fútbol ha enviado una carta a Rosa María Mateo, administradora provisional única de RTVE, denunciando lo que considera una "actuación ilegítima y contraria a las leyes de mercado" en relación a la renuncia de la corporación a pujar por los derechos audiovisuales de la Supercopa de España, que se celebrará del 8 de enero al 12 de enero de 2020 en Arabia Saudí.
Luis Rubiales, contra RTVE
De igual manera, RTVE destacaba que emitirá las competiciones deportivas internacionales ya firmadas "como el Rally Dakar 2020, cuya adquisición de los derechos de emisión se produjo en el mes de julio de 2016". Sobre la renuncia a pujar por la Supercopa recordaron que se trata de "una decisión basada en la coherencia teniendo en cuenta que RTVE apuesta por el deporte femenino y Arabia Saudí es un país que no respeta los derechos humanos y en concreto los de las mujeres".
La amenaza de Rubiales
Luis Rubiales ha respondido ahora a la polémica con una carta directa y contundente a la administradora de Radio Televisión Española, en la que exige una rectificación pública por el daño causado por la decisión de negarse a participar en la puja. El presidente de la RFEF considera que RTVE se basa "en razones esencialmente políticas que nada tienen que ver con una cuestión estrictamente comercial o económica".
Rubiales critica que la decisión "produce una evidente distorsión en los mercados", provocando que otras cadenas ya se hayan manifestado "arrastrados sin duda por su actuación irresponsable". Es el caso de Mediaset y Atresmedia. Ambos grupos han convenido que tampoco pujarán por los derechos audiovisuales del torneo.
Acerca del acuerdo ya firmado del Rally Dakar, Rubiales considera "inverosímil y absolutamente inaceptable que RTVE esté dispuesta a poner el dinero de todos para pagar los derechos de una competición privada-comercial extranjera con fin de lucro y no esté dispuesta a pujar por retransmitir una competición oficial de la RFEF, cuyo dinero se destinaría al fútbol base y a las selecciones inferiores".
Por todo ello, la RFEF exige "una rectificación pública inmediata" y amenaza con "ejercer cuantas acciones legales sean precisas para resarcir los daños y perjuicios causados y que se causen en el futuro como consecuencia".