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El jueves 4 de marzo, Telecinco emitió la séptima entrega de 'La isla de las tentaciones', en la que Manu González acabó cayendo en la tentación junto a Fiama Rodríguez. Sin embargo, lejos de vivir el momento en la oscuridad de su habitación, bajo las sábanas, la pareja se coló en el baño del dormitorio del gaditano, donde se acostaron por primera vez. Un movimiento por parte de ambos que supuso la infracción de las normas a las que se comprometen los participantes del reality, lo que acabó teniendo consecuencias para González.
Fiama y Manu alzan las manos tras salir del baño después de mantener relaciones en 'La isla de las tentaciones'
El gaditano recordó entonces cómo Fiama había anunciado que se iba a lavar los dientes, ante lo que él pensó que "te voy a dar la pasta", despertando risas entre sus compañeros. "No se ha matado a nadie", defendía González, despreocupado, ante las cámaras del programa. Una actitud muy diferente a la que mostró Fiama, quien apareció llorando a la mañana siguiente, arropada por algunas de las solteras. "Vamos a hacer un montón de daño a tu piva, que no tenía que ver esa mierda. No era necesario por treinta segundos de mierda", comentó la tentadora, después de señalar a Manu que "no estoy enfada contigo". "Me siento mala persona porque creo que no he sido empática con la novia de Manu. Una cosa es que me bese con él y otra, que haya algo más", declaró Rodríguez, entre lágrimas, ante el equipo del programa. "Por mucho que intentes controlarte, la cabra tira al monte y nos hemos quemado", declaró por su parte Manuel.
"No hemos pensado en engañar al programa"
Manuel, avergonzado al ver las imágenes con Fiama en 'La isla de las tentaciones'
El movimiento por parte de la pareja obligó a Sandra Barneda a intervenir y visitar a los chicos, dado que "uno de vosotros se saltó las normas de 'La isla de las tentaciones'". Un comentario ante el que González no dudó en achacarse la culpa, por lo que la presentadora le recordó que "tu compromiso es pasar esta dura prueba de amor las veinticuatro horas del día". Barneda entregó entonces a los chicos una tablet, con el fin de que vieran lo ocurrido, momento en el que el protagonista se mostró aparentemente avergonzado y reconoció que "he metido la pata y no he sido honesto". "Ni pensé en que estaba rompiendo las normas ni nada. Lo hice porque me salió", declaró el gaditano, tras lo cual Barneda le explicó que "tendrás que asumir las consecuencias de este gran error". "No hemos pensado en ningún momento en engañar al programa, simplemente, nos queríamos ahorrar unas imágenes en las que se viera movimiento bajo las sábanas", argumentó Manuel, quien conoció su sanción en la hoguera: no vería imágenes de Lucía Sánchez.
A pesar de la decisión del programa, Barneda matizó que, dado que eran "de suma importancia", serían sus compañeros quienes tendrían ocasión de ver los vídeos, para transmitírselos a González. En ellas, se mostró a Lucía bailando con Isaac Torres de forma sensual, al igual que jugueteando con él en la piscina y durmiendo juntos en una postura cercana y cariñosa. "Cuando su madre vea esto, no la va a reconocer", comentó Manuel, ante lo que Barneda replicó que "cuando tu madre vea, ¿te va a reconocer?". "Sí, porque sabe de qué pie cojeo. Sabe cómo soy yo. La he liado, pero mi madre lo sabía. Más sincero no puedo ser", respondió el gaditano, sin dudar. "Sinceramente, ya no sé qué creer. No sé si la conozco como pensaba. No me extrañaría que llegara hasta el final con este chaval", compartió González, sobre Lucía, momento en el que prometió que "lo que tenga que hacer, lo haré sin engañar a nadie y sin mentir".