Mar Regueras, actriz y presentadora que alcanzó el pico de su fama en los años noventa, ha vuelto a la pequeña pantalla, esta vez para ser entrevistada por 'Socialité' acerca de su etapa delante de las cámaras. La primera serie en la que participó de forma fija fue 'El comisario', papel al que siguieron 'De moda', 'Herederos', 'Tita Cervera. La baronesa', 'Hospital Central', 'Sin identidad' o 'Servir y proteger', aunque no siempre ha podido trabajar de manera continuada.
A pesar de ello, mantiene grandes recuerdos de su época como actriz, como su nominación al Goya en 2003 por su papel en la película "Rencor". Todavía mantiene un chat con sus compañeros de 'El comisario', veinte años después de su final. Sin embargo, no todo es positivo: "En 'Grand Prix' mi experiencia es muy buena, aprendí muchísimo. Cierto es que Ramón García en algún momento me lo hizo pasar un poco difícil porque era un profesional como la copa de un pino, pero también muy exigente", ha revelado.
Ramón García y Mar Regueras en 'Grand Prix'
"Me he pasado más de una década sin trabajar y pasándolo bastante mal, no entendiendo nada. Cuando cumples 40 parece que te has hecho un hueco en la televisión y todo el mundo te reconoce, piensas que es el momento y resulta que deciden pararte", se lamentó Regueras. "A mí me han preguntado si me he retirado. Yo jamás me he retirado, si acaso me han retirado. Sigo en activo y seguiré siendo actriz hasta que me muera. Otra cosa es que hoy en día no viva de esto".
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Como presentadora, participó en el mencionado 'Grand Prix' y ' Música sí', ambos en La 1. Sin embargo, su vocación era, y sigue siendo, la actuación. En los últimos años ha participado en series ocasionalmente, pero no de una manera que le permita subsistir. "Por no vivir de la interpretación no se acaba el mundo. He estado trabajando en el sector inmobiliario, ahora mismo estoy trabajando en una notaría... ¿Que me gustaría trabajar de lo mío? Sí", reconoce.