Marina Díez, una de las primeras concursantes de la historia de 'Gran Hermano', tenía situado su negocio en un bar ubicado en un local para personas de la tercera edad. Sin embargo, se ha visto obligada a abandonar el lugar que regentaba en la ciudad mallorquina de Llucmajor a consecuencia del desahucio aprobado por el consistorio. Díez recibió el apoyo de un grupo de ciudadanos que se congregó a las puertas del bar.
Marina Díez
La exconcursante asegura que la asociación de mayores decidió romper el convenio con el ayuntamiento antes de tiempo, puesto que el contrato debería haber finalizado en febrero de 2022. La mujer ha dejado el asunto en manos de sus abogados, ya que señala que "detrás de este desahucio hay una serie de desavenencias con algunos integrantes de la directiva".
Díez afirmó que, para romper el convenio y así sacarla del local, argumentaron que "se necesitaba el espacio para usos educativos" debido a la situación del Covid-19. Además, aseveró que no se le informó hasta semanas más tarde de la firma del convenio. La exconcursante ha utilizado esto como argumento en el expediente de desahucio.
Lo más leído
Marina Díez no da la batalla por perdida
La fecha límite que se le dio a la exhabitante de la casa de 'Gran Hermano 1' para abandonar el local fue el 18 de noviembre de 2021 a las 24:00h. Tras largas jornadas para recogerlo todo, echó el cerrojo y entregó las llaves. Pese a todo, y más teniendo en cuenta el duró revés de esta decisión, Díezaseguró que seguirá luchando y demostrar así que se ha actuado incorrectamente.