Marina García, participante de 'La isla de las tentaciones 3', no se imaginaba el incómodo suceso que se iba a producir mientras disfrutando de un día tranquilo de playa en Conil de la Frontera (Cádiz), junto a su padre, su novio Jesús Sánchez Seda y su perrita Caramelo. Todo apuntaba a que pasarían un rato agradable, sin embargo, la situación se tornó surrealista tal y como comentaba en su Instagram.
"Nos pusimos en una zona donde no había nadie cerca, colocamos nuestra sombrilla y allí tenía a Caramelo a mi lado todo el tiempo (echadita, sin molestar)". Según Marina, muchos seguidores le habían recomendado aquella playa porque estaba permitido acceder con perros. Pero todo cambió cuando la exconcursante decidió refrescar a Caramelo en el mar debido a las altas temperaturas.
Marina García, en 'La isla de las tentaciones'
"Al volver a la sombrilla empezó a sonarle la tripa y a hacer caca suelta (los que me seguís sabéis que mi perra tiene problemas de estómago), muy poco, fueron como tres gotas. Vale, pues como era tan líquido y no tenía nada en la mano en ese momento, cogí y eché tierra (removí la tierra)", afirmaba Marina, quien poco después fue interceptada por el socorrista que le advertía de la prohibición de perros en esa playa "con un tono como si yo en ese momento estuviera cometiendo el peor de los delitos". Aquel momento llegó a su punto álgido cuando Marina reconoce que se alteró al conocer que un bañista había llamado a la policía.
Estos hechos provocaron la indignación de la influencer en las redes, que desahogándose ante sus seguidores concluyó que "hay gente muy infeliz en este mundo. La maldad es la peor enfermedad que existe y, desgraciadamente, en el mundo hay mucha". Pero el incidente no acabó ahí, ya que continuando con su relato, comenta que después fue contactada por la persona que supuestamente llamó al 112 a través de una cuenta falsa, dirigiéndose a ella de una forma poco agradable.
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De personaje televisivo a emprendedora
Marina García, conocida por concursar junto a su pareja Jesús Sánchez en la tercera edición de 'La isla de las tentaciones', ha llamado la atención de muchos de sus seguidores al alejarse por decisión propia de la televisión. Y es que a pesar de ser una de las grandes protagonistas del reality, ha expresado su intención de dejar huella como empresaria alejada de los focos. Cuenta con más de 800.000 seguidores en Instagram y aunque se considera creadora de contenido, también se muestra entusiasmada con su faceta emprendedora, ya que tiene una clínica de estética y espera abrir otra a corto plazo.