Mario Conde afirma que le gustaría tener una última conversación con el rey emérito: "Le quiero mucho"

Mario Conde se ha sentado con Gonzo en 'Salvados' para repasar aspectos clave de su polémica vida y de su papel como presidente de Banesto, que le confirió un poder sin precedentes en nuestro país y también le puso en contextos difíciles que supusieron su entrada en prisión y la ruptura de la relación con el que fuera su amigo, el rey Juan Carlos I. En la entrevista, el exbanquero ha dado su visión sobre el rey emérito y sus opiniones sobre la monarquía en respuesta a las preguntas de Gonzo.

A pesar de que Conde sí ha reconocido que controló informaciones sobre el rey Juan Carlos cuando eran amigos, ha negado que le prestara dinero para su regularización de Hacienda. Sobre su propia deuda, señalada entonces por el periodista, que asciende a 7,8 millones de euros en datos de 2021, el empresario ha remarcado que la cifra era mucho mayor hace unos años. El motivo por el que no le embargan la casa teniendo una deuda de tales dimensiones es claro: no es suya, sino de sus hijos.

Mario Conde contó también a las cámaras de Producciones del Barrio que lleva muchos años sin tener ningún contacto con el rey emérito; la última vez fue cuando todavía se ceñía la corona. "Yo no puedo decir que siga siendo amigo, lo que sí puedo decir con toda claridad es que yo le quiero mucho y que me ha hecho sufrir mucho todo lo que está pasando, y me he sentido impotente", expresó. Sí le gustaría tener una última conversación con él, aunque añadió: "No sé si sería buena".

Monárquico, pero crítico

Sus opiniones sobre la Monarquía son ambivalentes. Se muestra muy crítico con el concepto jurídico de la inviolabilidad: "No es creíble para una persona sensata que en pleno siglo XXI exista en un sistema jurídico occidental y moderno una persona que pueda robar, matar, asesinar y violar sin responsabilidad penal. Es una interpretación que viene de arrastre del concepto franquista y no separa a la persona del Estado". Sin embargo, sí cree que Juan Carlos I "pasará a la historia como un gran rey, que en cuanto persona en los últimos años de su vida tuvo una serie de problemas que no afectaron en modo alguno a la calidad de su reinado en cuanto tal".