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EMOCIONANTE

Mario Prieto, concursante de 6 años, impresiona bailando flamenco y merengue en 'Got Talent'

El concursante ha terminado llorando por el "no" de Risto, que finalmente ha tornado en un "sí".

Por Maripaz AlcarazPublicado: Lunes 23 Septiembre 2019 23:23 | Última actualización: Lunes 23 Septiembre 2019 23:41

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España

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6,6

Popularidad: #29 de 2.083

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Si durante la primera gala de la quinta edición de 'Got Talent España' vivimos momentos emocionantes y que nos dejaron con la boca abierta, la segunda no iba a ser menos. En el estreno, además de la asociación Nana, que se llevó el Pase de Oro conjunto, el verdadero protagonista fue Hugo Molina, el concursante más pequeño que ha pasado por el formato de Fremantle Media en toda su historia.

Durante la noche del veintitrés de septiembre, otro niño ha conseguido ganarse el cariño de todo el auditorio. En este caso ha sido Mario Prieto, un malagueño de seis años que ha llegado al concurso para demostrar el arte que tiene sobre el escenario. Después de explicar a su manera de donde venía, el pequeño -muy convencido de sí mismo- se ha arrancado a bailar y ha recibido una gran ovación por parte de todos los presentes.

Su actuación, mezclando el flamenco y el merengue, nos ha recordado inevitablemente a la del niño del tambor. En mitad del escenario y mientras cambiaba de un ritmo a otro, ha dejado boquiabiertos a los espectadores cambiándose de ropa. Todos los jueces han querido darle la enhorabuena por el show que había formado en el plató y darle su voto afirmativo -incluso Risto que ha tenido que cambiar su voto por no ver llorar al niño- y una nueva oportunidad para ejecutar una nueva coreografía en la siguiente fase.

El concursante más joven de la historia

Hugo apareció en el plató de Telecinco al principio del programa y dejó perplejos a todos los presentes. De la mano de su padre, el niño, con solo dos años de edad, empezó a tocar el tambor con un salero al que no estamos acostumbrados en pequeños como él, que con un año comenzó a ensayar. Eso, acompañado de la ternura que transmitía con sus contadas palabras, hizo que todos los jueces quisieran volver a verle y que le dieran cuatro "síes".

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