Mario Vaquerizo sufrió el pasado 19 de octubre una aparatosa caída del escenario mientras daba un concierto en el festival Horteralia, celebrado en Cáceres. Dada la gravedad del impacto y tras haber perdido el conocimiento, el cantante tuvo que ser rápidamente trasladado al hospital para evaluar su estado de salud y confirmar que no se habían producido daños neurológicos.
Después de estar ingresado durante dos días, el artista ha recibido el alta hospitalaria en la mañana del lunes 21 de octubre. En la puerta del hospital de Cáceres se encontraban los medios, dispuesto a conocer el estado de salud del convaleciente. "Estoy muy bien. Muchísimas gracias por venir, me han cuidado en este Hospital Universitario de Cáceres de putísima madre", aseguraba Mario Vaquerizo con un collarín y sentado en una silla de ruedas, tal y como recogía 'Mañaneros'.Mario Vaquerizo abandona el Hospital Universitario de Cáceres
"Ha sido una caída muy tonta y hay que tener mucho cuidado con las caídas", explicaba el cantante a los periodistas. Además, desvelaba cuál era su parte médico y en qué había quedado la lesión después del terrible impacto. "Tengo una fractura de la vértebra 4 y la vértebra 6, pero estoy en muy buenas manos de este maravilloso equipo médico que me ha tratado fenomenal. Ahora voy un poquito dopado".
Las primeras palabras de Alaska
Horas antes de que Mario Vaquerizo recibiera el alta médica, Alaska informaba de cómo había vivido la caída de su marido. "Me ha pillado fuera de España, entonces el susto en el cuerpo todavía lo tenemos todos. He llegado anoche y a él le dan el alta hoy. Sigue en Cáceres, en el hospital, que están siendo estupendos", explicaba a Chance. "Contusión tuvo entera, fue una contusión de todo, pero no ha sido nada neurológico de lo que haya que preocuparse".
La cantante y presentadora aseguraba que su pareja se encontraba bien después de la caída: "Él está animado, no ha perdido el humor. Está preocupado porque come mucho desde que está metido en el hospital y lo están tratando muy bien". Alaska no tenía planes de trasladarse a Cáceres, pues como iba a recibir el alta hospitalaria ese mismo día, prefería esperarlo en su casa para ayudarlo con la recuperación en Madrid. "Por suerte está con su hermana y está con su grupo, que es lo que más me podía preocupar a mí".