Marta Peñate y Mayka Rivera, concursantes de 'La isla de las tentaciones 2', ya demostraron tener ciertas discrepancias en su paso en la isla, y con el paso del tiempo, no han sabido solucionar sus diferencias. Durante la emisión de 'El debate de las tentaciones', Marta abandonó el piso de 'Solos' para conocer en el plató quién iba a ser su nuevo compañero tras la despedida de Noel Bayarri.
Marta y Mayka en el plató de 'El debate de las tentaciones'
"Se me hace raro venir sin el pijama, o sin venir disfrazada. Me tendría que haber vestido de cerebro", fueron las primeras palabras de la canaria, que Mayka se las tomó como un ataque indirecto hacia su persona. Continuó su conversación con Sandra Barneda sobre su expareja Lester Duque, afirmando que ella se ve venir a las personas de lejos, comentario con el que Mayka aprovechó para hacer burla. "Pues no lo parece porque estás haciendo así con los ojos", imitando la murciana la vista forzada de Marta. Entonces, estalló la batalla de zascas.
Marta relató que le habían contado que durante la visita de Mayka a un restaurante, hizo referencia a la comida afirmando que "para Marta las sobras, que le gustan". Con ese comentario, intentaba ofender a la canaria por su presunta relación con Tony Spina, el denominado como "ex de España" por Suso Álvarez, ya que ha sido pareja de Oriana Marzoli,Makoke, o la más reciente, la propia Mayka. No obstante, la murciana desmintió que eso ocurrió. "Cállate mejor, porque tú te has comido sobras de tíos por todos los lados", respondió Marta ante una Mayka que no dudó en aclarar a gritos que estaba soltera.
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El origen de la disputa
La propia Marta ha afirmado que su mala relación con Mayka se da desde la isla, donde asegura que "no me gustaron ciertas actitudes, porque me intentaste dejar sola en muchas ocasiones"; a lo que Mayka defendió que todo era producto de su imaginación. Además, la canaria afirmó que la murciana se aprovecha de ella para conseguir minutos de fama y televisión. "Tu no tienes imaginación, porque no tienes ni cerebro", sentenció Marta.