'MasterChef 8' comenzó sus emisiones en La 1 el 13 de abril sin haber terminado de grabar toda la edición por la crisis del coronavirus, por lo que la recta final del talent show culinario está todavía en el aire. Sin embargo, RTVE ha decidido retomar el rodaje este lunes, cuando todavía se mantiene el estado de alarma nacional. Pese a que han recibido toda clase de críticas, desde el ente público argumentan que van a continuar su trabajo como ya se está haciendo en otras cadenas de televisión.
Por este motivo, el ente público ha decidido divulgar las medidas extremas que va a tomar el equipo de Shine Iberia en su nuevo plan de grabaciones. Un equipo de técnicos de Prevención del SPP de CRTVE ha visitado los estudios de 'MasterChef' y se han acordado una serie de protocolos, que incluyen la desinfección regular de las instalaciones a través de una empresa y un producto homologados por el Ministerio de Sanidad.'MasterChef 8' retoma sus grabaciones
El servicio de limpieza también se va a intensificar y el personal, limitado al estrictamente necesario, tendrá que pasar un control de temperatura para acceder a los estudios. El máximo que podrá presentar un trabajador es de 37,3º C. Del mismo modo, la entrada y la salida al edificio se han separado y los pasillos, de más de cuatro metros de ancho, se han dividido para que las personas circulen en ambos sentidos. Esta delimitación se extiende también a los distintos departamentos de trabajo.
Cambios en el plató
RTVE y la productora Shine Iberia van a ofrecer material y esterilizadores adecuados a sus trabajadores, con dispensadores de desinfectante en diferentes puntos, entrega de guantes y mascarilla FFP2 diaria y colocación de contenedores de residuos para deshacerse de estos. En cuanto a la dinámica de rodaje, se ha aprobado estudiar el número de concursantes y cámaras que pueden encontrarse en el supermercado al mismo tiempo para asegurar la distancia social.
Del mismo modo, se evitarán posibles contagios cambiando la mesa grande de la sala de invitados por cuatro pequeñas. Los cámaras se situarán siempre al menos a dos metros de los aspirantes y los micrófonos se los colocará a si misma cada persona, además de incrementar las cámaras robotizadas. En caso de que el equipo técnico tenga que acercarse más de lo debido, se utilizarán mascarillas y gafas.