'MasterChef' vivió en el cuarto programa de su octava edición su noche más tensa y su expulsión más polémica. Saray fue la elegida del jurado para abandonar las cocinas al "realizar" una elaboración que fue calificada por los jueces como una falta de respeto hacia el programa, sus compañeros y el producto principal del plato: una perdiz.
Saray presenta una perdiz sin desplumar en 'MasterChef 8'
Rendida ante el poco tiempo que tenía, decidió colocar la perdiz sin desplumar sobre el plato, decorado con tomates cherry y apios y sobre una cama de níscalos. Pepe Rodríguez ya le advirtió que no hiciera eso por ella misma, pero Saray desoyó su consejo y se presentó ante el jurado tal y como había planeado. Esta decisión fue también duramente criticada por varios de sus compañeros, quienes no vieron con buenos ojos su acción. "Podría haber ayudado a muchísima gente y haber sido un icono y de repente todo se le ha desmoronado. Todo. Una pena. Lo que siento hacia ella ahora mismo es compasión", expresaba Luna. "Esto ha sido una vergüenza para todos", criticaba Iván.
Expulsión directa
"Que me faltes el respeto a mí, que lo has hecho; que le faltes el respeto a tus compañeros, que lo has hecho; que le faltes el respeto al programa, que te has hartado, y a los 28 mil candidatos a entrar en estas cocinas, evidentemente no se puede hacer", sentenciaba con dureza Jordi Cruz. "Entiendo que no quieras cocinar, que te rindas, lo entiendo todo. Pero lo que le has hecho a este producto no tiene justificación ninguna". Saray quiso negar que se había reído del jurado, pero Cruz la mandó callar: "Ni se te ocurra abrir la boca porque no tienes nada que decirme".
Saray se enfrenta a Jordi Cruz por su polémico plato en 'MasterChef 8'
"Nos hemos equivocado terriblemente contigo. Y me sabe mal. Este jurado se ha equivocado. Creo que es la vez que más nos hemos equivocado a la hora de dejar entrar a alguien por esa puerta en 8 años", dejaba claro el juez barcelonés. Saray se excusaba en que con 20 minutos y "el bicho moribundo" no podía hacer nada. "Vienes aquí con la gracia que piensas que tienes tú a hacer esta idiotez", criticaba Pepe Rodríguez.
"Desde que me disteis el delantal negro, me bloqueé y me sentí mal. No quería seguir", se defendía la concursante. "Te agradecería que te quites ese delantal, que no mereces ni el negro, y que cruces esa puerta ahora", decía Cruz, expulsándola directamente del talent show. En su marcha de las cocinas, Saray tiraba el delantal sobre la mesa mientras canturreaba y realizaba un giro en señal de despedida antes de desaparecer por la puerta.
La explicación de Saray
Saray ha aprovechado su cuenta de Instagram para expresar cómo vivió ese momento y asegurar que le dio pena marcharse de esos modos del concurso. "Es cierto que el jurado iba a machete conmigo y que yo no estaba haciendo las cosas del todo bien", afirma. "Estaba mal y de verdad que me sentí en algunos momentos como una leona herida entre hienas. Sé que mi actuación no fue la correcta ni la ideal, pero así actué, y de verdad que lo siento; ojalá hubiera sido todo de otra manera. Pero lo que sí puedo decir es que nunca fui cínica, siempre fui pura, siempre fui verdad, dije lo que pensaba, fui auténtica y me siento orgullosa de ello".