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Marta Riesco, en imágenes 6 fotos
Marta Riesco ha vuelto a ser noticia, pero para mal. La reportera de 'Fiesta' protagonizó el pasado 1 de febrero una fortísima bronca con Cristina Porta mientras 'Sálvame' se estaba emitiendo en directo. Ambas coincidieron en el photocall celebrado en Las Ventas y, tras un primer rifirrafe por la aparición de José Ortega Cano y Gloria Camila, la tensión no hizo más que crecer hasta el punto de que la madrileña echó en cara a su compañera de cadena la poca profesionalidad que tenía por trabajar en la productora que había sido clave para destapar a su pareja.
Sin embargo, toda acción tiene sus consecuencias y así lo ha experimentado Riesco en sus propias carnes. La periodista utilizó sus redes sociales dos días después de lo ocurrido para comunicar la decisión que la cadena había tomado con ella por el espectáculo que se vivió en el evento. "No puedo volver a hacer directos porque no me está permitido meterme con esas personas de la cadena que me han hecho tanto daño", explicaba en un vídeo entre sollozos.Marta Riesco
"Si ellos se meten conmigo sí está permitido, pero lo que no puedo hacer es, yo en directo, meterme con ellos. Todas las cosas que dije son ciertas, todas las cosas que puse en Instagram son ciertas. Solo que ellos no quieren que yo deje mal a esas personas", explicaba en sus historias de Instagram. "Estuve seis meses haciendo fotocopias. De esta manera, me han vuelto a comunicar que no quieren que vuelva a hacer directos como reportera".
Culpas a La Fábrica de la Tele y a Mediaset
La exreportera de Unicorn Content alegaba en su discurso que La Fábrica de la Tele había ejercido continuamente un acoso hacia su persona. Según explicaba, a Borja Prado, la persona a la que recurrió en el directo, no le habría gustado que, además del espectáculo dado en el photocall, hubiera utilizado sus redes sociales para criticar a 'Sálvame', a Belén Esteban, a Alexia Rivas y a Maestro Joao. "De nuevo, los abusadores vuelven a ganar. De verdad, nadie sabe lo que he pasado este año, pero ha sido el peor de mi vida, aunque me veáis reír, es muy duro ir a sitios, a un trabajo donde te insultan, te vejan y te ridiculizan". Tras estas palabras, puso el foco en Germán González, acusándolo de una campaña de acoso y derribo.
Sin embargo, todas las culpas principales fueron para la productora e incluso así lo dejó escrito en una historia. A la mañana siguiente, más tranquila, comunicaba que le habían dado la baja médica: "Si no llega a ser ayer por mi pareja... En fin, no sé qué hubiera pasado, os lo digo sinceramente. Me han dado la baja, los médicos consideraron que no podía seguir trabajando, es la tercera baja en un año que me dan por tema de salud mental".
Mientras que defiende a su productora por haberla ayudado en todo momento, aprovechaba también "su cuenta personal" para atacar directamente a Mediaset: "Pedí que se me diera por escrito las razones por las cuales se me aparta de mi puesto y no se me han dado porque [...] no las hay". Además, azotaba: "Tiene gracia porque en esta cadena defendemos la igualdad, que las mujeres no se callen, que las mujeres luchen, contesten, denuncien, hablen".