En varias ocasiones, Netflix rechazó la idea de introducir anuncios en sus contenidos. Sin embargo, en noviembre de 2022 la plataforma decidió apostar por ese modelo empresarial, asumido previamente por competidoras como HBO Max, incluyendo un plan con publicidad a un precio más barato que el resto. Desde entonces, otros servicios de películas y series en streaming como Disney+ han emulado esta forma de negocio, y otros como Prime Video seguirán sus pasos más adelante.
Con este viraje y medidas como la persecución a las cuentas compartidas, la plataforma ha conseguido que gran parte de sus clientes se dirijan hacia el plan con anuncios dejando, en algunos casos, de compartir las contraseñas. Tras un arranque rodeado de dudas, este plan ha conseguido abrirse paso entre las prioridades de los clientes y, como ha anunciado la propia compañía, ha superado la barrera de los 15 millones de usuarios activos al mes. Sin embargo, esa cifra no se corresponde directamente con el número de suscriptores que pagan la tarifa mensualmente, ya que todavía no se ha desvelado cuántos de los 247 millones de clientes totales proceden del plan con spots.
En el mismo comunicado, compartido el 1 de noviembre, la plataforma de servicio en streaming ha anunciado que va a mejorar su plan con publicidad gracias a un avance considerable. Después de haber elevado la calidad de vídeo de 720p a 1080p y de haber ampliado las pantallas simultáneas a dos, la tarifa más amable a nivel económico incluirá también una función disponible en sus hermanas sin anuncios: la descarga de contenidos para ser vistos sin conexión. La implementación de esta funcionalidad se llevará a cabo a finales de esta misma semana.
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