Si hay un rostro que no ha dejado de trabajar desde que iniciase su carrera profesional, esa es Michelle Calvó. La intérprete canaria ha formado parte de importantes ficciones televisivas como 'Amar es para siempre' en Antena 3 o del film "El club de los incomprendidos", además de trabajar en otros proyectos como 'Toledo, cruce de destinos', 'Aída', 'Bienvenidos al Lolita', 'Isabel', 'Yo quisiera' o 'Los Nuestros 2'. La intérprete no ha dejado de trabajar, especialmente en la pequeña pantalla, una trayectoria que no se detiene y es que ahora forma parte de 'Secretos de Estado', la gran apuesta de Telecinco.
Michelle Calvó
¿Qué sensaciones tienes después del estreno de 'Secretos de Estado? ¿Cómo valoras las críticas a la serie (positivas y negativas)?
Es un proyecto en el que he querido pararme a leer todas las críticas y comentarios, para todos nosotros esta serie era prácticamente como un bebé. Nos costó mucho sacarlo adelante y lo conseguimos, formando un gran grupo. Lo mejor de esta serie es la familia que hemos conseguido formar y por eso quería saber qué opinaba la gente. ¿Críticas? Ha habido tanto negativas como positivas, pero buenas hay muchas. Estoy muy feliz y totalmente agradecida de mi trabajo. Por otro lado, entiendo que no podemos gustar a todo el mundo y acertar a la primera es muy difícil. Hay que tener en cuenta además que esas críticas negativas se basan en gustos y conocimientos. Pese a todo esto, yo estoy muy contenta para lo que mí ha significado.
Entiendo las críticas, no podemos gustar a todo el mundo
¿Qué opinas de la audiencia? Conseguisteis liderar la noche
La audiencia reflejó un buen dato, fue lo más visto de la noche. Además, viendo la curva de audiencia que nos enseñaron vemos que sí muy buena. Ahora solo pido un poco de calma porque lo que vieron fue un primer capítulo en el cual se inician las tramas. Hay que tener paciencia, calma y esperar a ver cómo se desarrollan todas las tramas. Estoy segura que hay tramas que van a acabar enganchando mucho, aunque hay que tener en cuenta que aunque tiene un fondo político, es una serie que trata de personas que hacen política, que se dedican a ello, no es una serie política.
¿Ha habido un error a la hora de hablar de la serie? ¿Se ha hablado demasiado de política? ¿Por qué se la compara con 'House of Cards'?
Es cierto que todos me han sacado a la palestra ese título y yo siempre he dicho, y sigo diciendo, que son series totalmente distintas. Si viene ese título a la mente del espectador, por mi parte estaría orgullosa porque es un serión espectacular y sería un piropo. Pero hay que salvar las distancias porque las tramas son distintas. Pueden compartir algunos puntos pero son series muy distintas que tienen una historia totalmente diferente.
¿Cómo se gestionó el proyecto? ¿Es cierto que inicialmente se planteó como un proyecto puramente político?
Es cierto que hubo un momento en el que noté un cambio en el personaje y no sé por qué, no te puedo explicar de dónde vino, pero sí es cierto que llegó un punto en que Paula se debilitó. Se me explicó, lo entendí pero aun así, como soy muy cabezota, dije: 'Vale, lo entiendo todo, pero voy a llevarla al punto al que yo siempre he querido llevar a Paula". Me dieron luz verde y no tuve problema, la verdad es que nunca he tenido queja. No se me vendió en ningún momento nada que no fuese.
Michelle Calvo en ?Secretos de Estado'
Me dejaron poder llevar mi personaje, así que no tengo queja, tengo que confesar que estoy absolutamente enamorada de Paula. A mi no se me vendió nada que no fuese, la verdad. Yo sabía lo que estábamos grabando, lo que había en la serie. Pese a ello, es cierto también que llegó un punto en que nos preguntamos varios actores: "¿Y ahora esto por qué?", pero nada más. Hay que tener en cuenta además que era un guion que se iba escribiendo poco a poco. Nunca tuvimos los guiones de los trece episodios. Nos dieron una base que es la que fuimos desarrollando a lo largo de los trece capítulos, conociendo a los personajes y sus tramas.
¿El destino de los personajes depende también de la forma en que lo interprete el actor, verdad?
Claro y tampoco quiero ponerme la mochila de responsabilidad absoluta a los actores porque también hasta cierto punto podíamos intervenir. Pero sí que me imagino que a los creadores y guionistas se les van ocurriendo cosas, y van escribiendo.
'Secretos de Estado' no es una serie política. ¿Te hubiese gustado protagonizar una de este género?
Sí, claro, me encantaría. Porque me parecería impresionante. En 'Secretos de Estado' toqueteamos un poco el escándalo, ahondamos un poquito... Pero a mí me encantaría meter mucha caña en el tema político porque me parece absolutamente necesario y creo que tenemos una herramienta maravillosa para hacerlo, que es la ficción. Es como tocar un timbre de alarma para ver si algo suena.
Michelle Calvó y Miryam Gallego en 'Secretos de Estado'
¿Cómo me definirías 'Secretos de Estado'?
La resumiría en una frase que hemos utilizado mucho: "la erótica del poder". Esa es la definición de la serie que dijo el creador de la ficción y que comparto por completo. 'Secretos de estado' es la erótica del poder y cómo se puede jugar o cómo se puede manipular desde el erotismo en la política. En esta serie he aprendido que por suerte o por desgracia hay una parte muy banal en el ser humano y hay muchos ámbitos y profesiones, no solo en la política, en las que la apariencia física de una persona hace mucho.
¿'Secretos de Estado' es también un juego de ambición y pasión entre los protagonistas, no?
Sí, y además desde el primer capítulo. Nada es lo que parece, una persona puede estar diciéndote "te quiero" y a la siguiente secuencia ver cómo se lo dices otro. Y todo con un tinte de ambición, de saber qué objetivos o metas tiene cada personaje y muchos arrasan contra lo que sea por sus motivaciones.
¿Cómo te llega el personaje de Paula? ¿Costó aceptar?
El creador y un guionista de la ficción me ofrecieron participar en el casting para el papel y obviamente, no podía decir que no. A mi estas cosas son las que más me gustan. Hice mi prueba, formé parte de una selección muy larga y fuerte porque había nombres muy potentes y finalmente mi esfuerzo tuvo recompensa y el trabajo se valoró. Es un proyecto que me interesaba muchísimo, sobre todo me interesaba Paula porque creo que es una mujer fuerte, con carácter feminista, luchadora. Y siempre poner piel y vida a ese tipo de personajes que luchan por el empoderamiento femenino, bienvenidos sean.
Aunque la serie tiene un fondo político, es una serie personas que hacen política
¿Sentiste vértigo al hacerte cargo de un personaje tan protagonista y tan complejo? ¿Responsabilidad al liderarlo en el prime time de Telecinco?
Obviamente todo proyecto y por supuesto un prime time en Telecinco a mí me motiva. Ni me da vértigo ni miedo, me motiva. Es algo que hay que hacer y este era un proyecto que sin duda me atraía mucho y por ello me crecí mucho al aceptarlo. Desde muy pequeña he sido así y tenía esa mochila de responsabilidades de querer hacerlo bien, como todo lo que hago en mi vida. No tengo vértigo, tengo todo el rato motivación.
¿Con Paula se demuestra que por fin, las mujeres sí tienen peso en la política? ¿Se habla de ello en la serie?
Absolutamente, de hecho es una nueva era de lo que estamos hablando. Hablamos del empoderamiento femenino, en todos los ámbitos, y que sean en altos cargos. Creo que tenemos una herramienta muy poderosa en la ficción, un poder de cambiar la mente de los espectadores. Poder formar parte de ello de alguna manera, a parte de mi vida personal todo lo que llevo a cabo, me hace muy feliz.
¿'Secretos de Estado' es una serie liderada totalmente por mujeres?
En el piloto sí que tenemos mucha repercusión, pero a mí lo que me gusta realmente de 'Secretos de Estado' es que no hay una guerra de sexos. En esta serie se muestra a personas con caracteres fuertes y con personalidad. No hay mujeres fuertes y hombres calzonazos, para nada. No es una guerra de sexos. El feminismo lucha por la igualdad de sexos, es decir, hay hombres fuertes en este proyecto, y, a parte de que lideran la serie, lideran también dentro de la ficción el partido político, etc. Y también vemos mujeres que no se dejan arremeter por hombres, no dejan que los hombres dictaminen lo que deben de hacer, o sentir, o cómo llevar a cabo su vida. Pero lo que más me gusta es que es una cosa de igual a igual, no que la mujer quede por encima del hombre, ni el hombre por encima de la mujer.
Michelle Calvó
Paula es una mujer independiente y fuerte, ¿pero está enamorada de Alberto?
Creo que Paula está enamorada de su fuerza, de su profesionalidad. Está muy orgullosa y muy enamorada de dónde ha llegado. No tiene miedo del lugar en el que se encuentra, porque es una mujer muy fuerte. Tiene miedo y le duele que se ponga en duda su profesionalidad y su trabajo, lo que ya le han reconocido como buena profesional. Ella confía mucho en si misma y eso es lo que más le duele y yo creo que va a ser el motor absoluto en su lucha para demostrar ciertas cosas. Siente algo por Alberto, por supuesto. Pero en esta serie los personajes son muy egocéntricos y tienen claros sus objetivos y sus metas. Si en algún momento dado del camino hay algo que va a entorpecer no van a tener miedo de decir adiós a muchas cosas.
Pero le da rabia ser siempre la segunda por detrás de Ana Chantalle, ¿no?
Sí, ese discurso es súper típico pero aquí se le da la vuelta. Lo bueno de esta serie es que usamos los clichés típicos para manipular, para jugar con el espectador. Nada es lo que parece y toda la información que tenemos, absolutamente toda, la manipulamos. Paula tiene información de primera mano de su profesión y su labor, y la tiene ahí. Podemos pensar que Paula está en un segundo plano pero también se nos puede ocurrir pensar que esa posición la tiene planeada a propósito para jugar con la información que tiene. Además, veremos una lucha interna en todos los personajes entre los valores que tienen realmente como seres humanos y los valores que la política les obliga a tener.
Esa batalla es muy seria y llega en un momento muy importante de la serie. El mundo de la política y el control es algo que agota y ella al final es periodista, y el tener el control absoluto de la información acaba agotando, yo llegaba a casa de interpretar a Paula exhausta. Además, veremos como se acaba preguntando si todo esto merece la pena, se lo pregunta porque piensa que ha manipulado y ha mostrado una cara de ella que no quería. Ni lo blanco es blanco, ni lo negro es negro y no es oro todo lo que reluce. Hay grises y todo depende de las circunstancias de los personajes y de los objetivos de los personajes y en muchos otros grises.
En esta serie veremos que nada es lo que parece
¿Si Paula tiene que aliarse con Ana Chantalle, lo hará?
Pues lo vamos a tener que ver. No sé si es tanto un complot o una unión, sino que es un "sálvese quien pueda". Paula sabe mucho, muchísimo. La información es poder, según lo que yo he visto en la serie y he aprendido.
En el primer episodio vemos a una Paula débil y hundida en la cárcel. ¿Cómo viviste el rodaje de esas escenas en la prisión?
Fue una de las escenas más duras, porque me quitaron la ropa y grabábamos en una cárcel de verdad, en Segovia, que actualmente se usa como centro de cultura y en rodajes de series y películas. Estar ahí metida y pensar que ahí habían estado personas a las que les habían quitado su libertad por lo que sea fue duro... es una energía que yo sentía en ese momento. Además, hacía muchísimo frío y el manguerazo fue con agua helada, me dolió muchísimo.
Sé que ha habido mucho revuelo con las personas que trabajan en la cárcel, porque les ha afectado mucho que se mostrasen esa parte. Quiero recalcar que en ningún momento hemos dudado de la profesionalidad, del trabajo y la labor que hacen estos, y además sé que luchan por conseguir un reconocimiento digno, que se merecen, pero no de puede olvidar que nosotros trabajamos en la ficción, que es una serie, que es imaginario, que forma parte de una historia que hay en su mente. Pero sí que es cierto que es un método de tortura y me dolió mucho, me costó muchísimo grabarla, me sentí pequeñita, me sentí muy dolida, muy muy dolida.
Michelle Calvó
¿Era necesario para la audiencia que viesen a una Paula hundida en este inicio?
Sí, pero es necesario ver más episodios. Además, tengo claro que como actriz no haría ningún proyecto en el que se denigra al ser humano. Y me refiero a machismo, homofobia, racismo... no participaría de ninguna manera, a no ser que esté justificado para explicar algo después. Hay que tener claro que lo que vemos aquí no es ningún tipo de denigración, es una escena que tiene completo sentido por lo que va a pasar después. Pero obviamente, hay que tener paciencia para verlo.
El final de Ana Chantalle y Paula en la cárcel, ¿cambiará el rumbo de la historia?
Esa escena es 'Secretos de Estado' en estado puro. Es vital esa energía que se repite en otros muchos momentos pero que no es nada transparente. Como curiosidad, esa fue la primera secuencia de la serie que grabé y sin duda, fue una auténtica maravilla. Es un honor y un placer rodar con Miryam, nos queremos muchísimo. Al verla nos escribimos enseguida y hablamos de lo orgullosas que estábamos, el gran el vínculo que creamos entre nosotras y las miradas. Nos llamamos y nos dijimos: "compañera, gracias".
Frank Ariza me ha dado cosas preciosas
¿Tienes la sensación que a día de hoy se tiene poca paciencia en televisión?
Sí, pero lo entiendo. Yo personalmente intento trabajar en ello. Pero entiendo que estamos en una sociedad en la que vivimos muy rápido y queremos las cosas inmediatas. Tanto en las cosas personales, y lo vamos a ver en esta serie también, como en las profesionales. Me gustaría que tuviesen más paciencia, pero tampoco nos han acompañado cosas muy positivas a la hora de estrenar, y me gustaría que no nos hagan culpables a nosotros de ello, porque nosotros queremos hacer nuestro trabajo lo mejor posible. Pido un poco de paciencia, entiendo lo que no nos ha favorecido.
¿Cómo es trabajar con Frank Ariza? Has compartido con él muchos de sus proyectos
Yo sinceramente voy a hablar de mi opinión personal y tengo que decir que Frank Ariza me ha dado cosas preciosas, muy bonitas. Estoy muy agradecida porque ha sido una relación en la que él me ha dado y yo le he dado, nos ha nutrido a ambos. Yo solo puedo darle las gracias. Ha traído hacia mí personas maravillosas, que me han hecho crecer como persona, como profesional y le deseo lo mejor del mundo y que siga cosechando éxitos, dejando a parte los gustos de cada uno, yo ahí no entro. Es que a todo el mundo con el que trabajo de verdad que les deseo el bien porque a mí me han dado mucho.
Michelle Calvó en 'Los Nuestros 2'
Él también te dio el personaje de Elena en 'Los Nuestros', un personaje súper diferente al de ahora. ¿Qué recuerdo guardas de la serie?
Fue algo mucho más corto que 'Secretos de Estado', no compartí tanto tiempo con mis compañeros. Pero tengo que decir que me encantó trabajar con Joaquín, el director. Me llevó en una secuencia a un límite al cual no había llegado y me gustó mucho porque volví a ver una parte de mí, de Michelle, como actriz, de crecerme ante algo y fue todo un rato. Además, me llevo el ser realmente consciente de cómo viven muchísimas personas, muchísimas mujeres, que no tenemos que irnos a otro país. Hay un punto en el ser humano que creo que está un poco vacío en cuanto a valores y creo que desviamos nuestra atención a cosas que no son tan importantes. Creo que hay un trabajo personal del ser humano que cada uno tiene que hacer, porque es lo que realmente más miedo me ha dado.
A veces desviamos la atención en cosas que no son importantes
Lo que se narra en 'Los Nuestros', es más cercano de lo que creemos, ¿verdad?
Totalmente, y lo vemos como algo súper lejanos porque ponemos las noticias y lo vemos a través de una pantalla. En general, en muchos ámbitos de lo que pasa en nuestro mundo nos hace falta tener más conciencia. Creo que también nos viene algo de escuela, de cómo gestionar nuestras emociones. No sabemos cómo gestionarlas y nos viene todo de golpe y lo que hacemos es quitarlas de nuestra vida. Simplemente vivimos el sálvase quién pueda, o salir adelante el día a día porque desgraciadamente tenemos muchas cosas contra las que luchar. Entonces es muchísimo dolor y no lo sabemos gestionar y lo quitamos de nuestra vida y nos apagamos el chip de empatizar, de la empatía.
Por último, ¿te atreverías a volver al entretenimiento?
Nunca digas nunca, yo los vería como retos y eso es algo que me gusta siempre. Tengo claro que soy una persona camaleónica, entonces tengo claro que mi profesión y por lo que llevo años luchando es interpretar. Por ahora, esa es mi prioridad y siempre lo ha sido. Aunque estoy estudiando Educación Infantil, que es mi otra prioridad y ya no doy a basto. No tengo tiempo para mucha cosa más, también está mi familia... Estoy feliz de la vida, agradecidísima y aunque yo tengo claras mis prioridades, lo que siempre decimos: nunca digas nunca. Cada experiencia te da una cosa, aprendes de ella y yo todo lo que sea aprender en esta vida siempre es bienvenido.