Sor Cristina Scuccia saltó a la fama por su participación en 'La Voz Italia', en la que se alzó con la victoria destacando por su sorprendente e inusual dedicación, además de por su voz. Tras un tiempo retirada de la televisión, ha reaparecido, eso sí, completamente cambiada. Ya no es monja y ni siquiera vive en Italia: Scuccia trabaja como camarera en España y, aunque mantiene su fe, ya no se dedica a la vida religiosa.
El programa 'Verissimo', en el Cannale 5 italiano, ha entrevistado a la exconcursante del talent, quien ha sorprendido a todos apareciendo con el pelo suelto, un traje rojo, maquillada y con un piercing en la nariz. En 2014, la edición italiana de 'La Voz' dio la victoria a su ganadora más disruptiva, que en su primera audición cantó "No one" de Alicia Keys, hábito y cruz colgada del cuello incluidos. Fue descubierta en un concurso religioso de canto con 26 años, 7 años después de que decidiera convertirse en monja.Cristina Scuccia
Después del concurso, la italiana fichó por el musical "Sister Act", basado en un grupo de monjas que cantan, y en el musical de Titanic. Fue después de esta carrera musical cuando decidió abandonar su dedicación religiosa, tras 15 años consagrada a la Iglesia. Cuenta que la exposición mediática le suscitó "muchos interrogantes" sobre sí misma y la pandemia cambió su visión de la vida. Tuvo que ir a terapia para salir de "la oscuridad": "No entendía quién era. Yo nunca he renegado de Dios, pero no me encontraba dentro de mi hábito", se sinceró.
No se cierra al amor
No reniega de su etapa como monja, que considera parte de "un camino maravilloso": "Sor Cristina está dentro de mí. Soy la que soy ahora gracias a Sor Cristina", aseguró. Sigue creyendo en Dios y guiándose por la religión, aunque sea de otra manera. Cree en el amor, aunque no es algo que considere por lo pronto: "No es mi prioridad en este momento. Tienes que cuidarte, amarte, antes de poder amar a los demás", dijo en el programa de Mediaset.