'Mujer (Kadin)' sigue siendo el gran éxito de la presente temporada en Antena 3 y es que pese a la gran competencia contra la que tiene que luchar en sus tres entregas semanales, la serie turca mantiene a sus espectadores casi intactos. Prueba de ello es el muy buen 15,4% de share y 1.977.000 que anotó en el episodio emitido este martes 29 de septiembre. Unos datos que no sorprenden teniendo en cuenta el gran momento que los fans de la ficción pudieron vivir en este capítulo y es que por fin vimos uno de los encuentros más esperados de toda la serie: el de Sirin y Sarp. Ambos personajes volvieron reencontrarse años después y lo hicieron dejando a todos los espectadores con la boca abierta.
Sirin en 'Mujer' (01x23)
Justo en el instante en el que Sarp salía, Sirin entraba al lugar. Fue entonces cuando ambos se reconocieron, se miraron a los ojos y se quedaron completamente impactados; especialmente Sirin que creía que el hombre estaba muerto. Su cara de terror y sorpresa fue evidente, pero... ¿qué pasó después? Pues la incógnita se resolverá en el episodio que Atresmedia emite este miércoles 30 de septiembre ya que el encuentro entre ambos fue el perfecto "cliffhanger" para que los espectadores se quedasen completamente pegados a su asiento. Está claro que ahora sí, la historia da un giro ya que la hermana de Bahar va a descubrir la verdad sobre el supuesto fallecimiento del que fue el hombre de su vida.
La reconciliación de Bahar y Enver
Pero el capítulo nos regaló muchos más momentazos. Uno de los más destacados fue sin duda la reconciliación de Bahar y Enver. El hombre le recordó a la protagonista de esta historia que Sirin lograría ganarles a todos si ellos cambian y se volvían como ella, algo que esta entendió. Por ello, no dudó en disculparse con el hombre, al que confesó sentirle de nuevo como a su verdadero padre. Pero fue la única reconciliación que Bahar vivió y es que Hatice al enterarse que Sirin le había pegado una paliza a Bahar decide abrazarla y dejarle claro lo mucho que la quiere. Lo que esta última no espera es que sin duda es un abrazo completamente envenenado ya que la vuelve a justificar a su hija diciendo que "está enferma", tal y como el psicólogo le ha explicado tiempo antes.