Hablando sin eufemismos, 'Mía es la venganza' fue un fracaso en Telecinco. Parecía ser una de las grandes apuestas de Mediaset con su regreso a las series diarias, pero la audiencia no le acompañó. Saltó a Divinity, donde siguen emitiendo todas las entregas, pues llegaron a grabar hasta 110 capítulos, dándole un final tras cancelarse por su fría acogida.
Hasta que se tomó la medida, hubo muchos rumores de qué estaba ocurriendo con la serie, pero el reparto estaba tranquilo porque no dependía de ellos, como cuenta Natalia Rodríguez a Diez Minutos: "La palabra que mejor nos definía entonces era incertidumbre. En esas situaciones tienes que enfocarte en tu trabajo y hacerlo lo mejor posible hasta el final", argumenta la actriz.Natalia Rodríguez, protagonista de 'Mía es la venganza'
Tomar el relevo de 'Sálvame' arrancando en un horario en el que llevaba este 14 años no era un tarea nada fácil: "No iba a ser así, pero nos ubicaron ahí, y nos enteramos en el último momento", explica Rodríguez, añadiendo que ser los sustitutos era "una responsabilidad que perjudicó a la visibilidad de la serie".
"'Sálvame' ha sido algo histórico en la televisión, y que a sus seguidores les quitaran su programa de un día para otro generó rechazo a lo que lo sustituía", continúa explicando la actriz, quien cree que "si nos hubieran puesto en otra franja horaria, igual le hubieran dado otra oportunidad a la serie, que es buena y no tiene nada que envidiar a otras diarias".
Sobre lo de Armando del Río
Cuando se presentó la serie, Armando del Río expuso que se les debería "dar las gracias" por sustituir a 'Sálvame' y el programa fue contra él dedicándole casi una entrega entera. "Yo no daba crédito con lo que estaba pasando", recuerda ahora Natalia Rodríguez, quien añade: "Era su opinión, y tiene que haber una libertad absoluta para decir lo que se piensa. 'Sálvame' decidió hacer casi un especial sobre él y me pareció igual un poco superlativo".