"The Sandman" saltará a la pequeña pantalla (y parece que esta vez sí va en serio). Más de tres años después del intento fallido por parte de New Line de convertir la popular novela gráfica de Neil Gaiman película, la plataforma de streaming ha firmado un acuerdo con Warner Bros. Television para adaptar la historia en una serie de televisión de acción real.
Allan Heinberg ("Wonder Woman") se encargará de escribir su guión y ocupará el puesto de showrunner. Gaiman ejercerá de productor ejecutivo junto a David Goyer ("Batman v. Superman").
Imagen de Morfeo, protagonista de "The Sandman"
"The Sandman" es una historia que mezcla terror, fantasía y mitología protagonizada por Morfeo, el Señor de los Sueños, que pertenece a una todopoderosa familia conocida como los Eternos. Tanto él como sus seis hermanos son seres casi divinos con poderes relacionados con el nombre de cada uno (Destino, Muerte, Destrucción, Deseo, Desespero, Delirio y, por supuesto, Sueño). En su primera etapa, la obra se centraba más en el terror y nos mostraba a Morfeo intentado escapar tras ser capturado por una secta de magia negra durante un ritual en el que se pretendía captura a su hermana Muerte.
La serie más cara de DC
Ni Netflix ni Warner han comunicado aún la noticia oficialmente pero según fuentes cercanas al proyecto la serie de "The Sandman" se convertirá en la más cara de DC Entertainment. Y, de ser así, el acuerdo supondrá una inesperada y necesaria inyección de ingresos para Warner, que se encuentra enfrascada en unas duras negociaciones con J.J. Abrams por una película y un serie y tendría la intención de renovar su contrato con Chuck Lorre antes de que expire en 2020.
Los intentos por convertir "The Sandman" en una franquicia cinematográfica comenzaron en la década de 1990 impulsados por Warner Bros., la compañía matriz de Vertigo. El proyecto pasó por muchas manos hasta los 2000, que se estancó. Pero en 2013 el propio Gaiman anunció que trabajaba en una película que iba a ser protagonizada y dirigida por Joseph Gordon-Levitt con el apoyo de New Line, propiedad de Warner Bros., sin embargo, en 2016 las manidas diferencias creativas con el estudio dejaron el proyecto sin su protagonista/director y sin guionista.
"Llegué a la conclusión de que la mejor versión de este material sería una serie de HBO o una miniserie, no un largometraje, ni siquiera una trilogía", confesó Eric Heisserer, el último guionista vinculado al proyecto de New Line. "La estructura del largometraje realmente no le encaja. Así que fui y dije que ese era el trabajo que había hecho, pero que no estaba donde debería estar. Tenía que ir a la televisión."
