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Poco podían esperar los seguidores de 'GH VIP 7' que este martes 15 de octubre, durante la emisión del 'Límite 48 horas' en Cuatro, se iba a producir un "crossover" entre el exitoso reality de Zeppelin con una de las series españolas más conocidas de Netflix. El surrealista momento lo vivimos de la mano del presentador del espacio, Jorge Javier Vázquez, que no dudó en realizar un guiño en directo a Noemí Argüelles, el reconocido personaje que Yolanda Ramos encarna en 'Paquita Salas'. De esta forma, el catalán evidenció que es fiel seguidor de la ficción creada por Javier Ambrossi y Javi Calvo para la plataforma de streaming, algo que en más de una ocasión ya había mencionado.
Noemí Argüelles, de 'Paquita Salas'
Vázquez quiso destacar el exitazo que tuvo la votación ya que estuvieron a punto de alcanzarse los 160.000 votos. "160.000 personitas, como diría Noemí Argüelles de 'Paquita Salas'", empezó diciendo el catalán, para después terminar la frase del famoso personaje: "Mucho poder, pero no voy a utilizarlo para el mal". El momento fue destacado por muchos en redes sociales y aplaudido por los presentes en plató. Este hacía referencia a un instante de la serie en la que Argüelles habla de sus seguidores en redes sociales: "Lo voy a decir, 430 seguidores. ¡Ahhhh! Vete a dormir tranquila porque lo que diga yo, lo van a hacer. 430 corazoncitos, 430 personas que están: ¿Qué dice? ¡Oeee! Lo vamos a hacer. Mucho poder, pero no voy a utilizarlo para mal".
Noemí Salazar, "mueble de la edición"
Gianmarco Onestini y Noemí Salazar fueron los concursantes más votados por la audiencia para convertirse en "mueble" de la presente edición. La que fuese integrante de 'Los Gipsy Kings' fue elegida, una decisión que no le gustó demasiado. "Estoy siendo yo. Cuando hay un conflicto saco la cara. No lo entiendo", declaró la concursante al conocer la decisión, reconociendo también que "llega un momento en el que me estoy bloqueando. No sé qué hacer". Minutos después, la chica rompió a llorar y decidió quitarse la caja de cartón que se le había impuesto como "castigo": "Soy la primera que se ríe de sí misma, hasta un límite (...) me he visto ridícula y no por mí, por mi familia".