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'Pesadilla en El Paraíso' alcanzó su undécima gala semanal la noche del miércoles 16 de noviembre, en Telecinco, en la que Omar Sánchez y Dani García se jugaban su permanencia en el reality. El duelo, en manos de la audiencia, se resolvió finalmente con la expulsión del canario, lo que suponía que su compañero se salvaba una vez más ante su rival, ya por tercera vez consecutiva.
Sánchez puso fin a su paso por el reality con el 58% de los votos de la audiencia en su contra, mientras García agradecía una vez más que se le permitiera continuar en el programa. "Estoy nervioso. Es mucho tiempo aquí, casi tres meses. La verdad es que estoy muy contento de haber conocido tanta gente, de haber convivido con ellos y haberme retado en este juego tan difícil que ha sido, de darlo todo y de enamorarme también", declaró el canario, quien subrayó, feliz, que "salí con novia" del reality, "un gran premio que me llevo".Manu González y Danna Ponce se convierten en nominados en 'Pesadilla en El Paraíso'
El concursante también tuvo ocasión de dar las gracias a Lara Álvarez por su apoyo, al igual que resaltó el trabajo y el trato del equipo detrás de las cámaras, "que siempre están al pie del cañón". "Tengo ganas de llegar a mi casa, de ver a Marina, de empezar este camino juntos", manifestó además Sánchez, antes de dedicar unas palabras de cariño a Víctor Janeiro, "un gran apoyo para mí". "Si no fuera por ti, ninguno habríamos podido sacar esto adelante. He aprendido muchísimo", elogió el canario, cuya marcha dio paso a una tensa votación para elegir al nuevo nominado del grupo.
Manuel y Danna, en manos de la audiencia
Con Iván Molina como capataz y Bea Retamal como inmune, los concursantes se enfrentaron a una nueva nominación en la que Manu González quedó en la palestra con los votos de Daniela Requena, García, Retamal y Danna Ponce, dada su nula o mala relación con ellos. El segundo nominado, como es habitual, fue designado por el expulsado de la noche, momento en el que Sánchez se decantó por situar a Ponce en manos del público, puesto que era la única de las últimas incorporaciones a la que podía nominar: "Con mis compañeros antiguos estuve bastante tiempo y tengo que nominar a uno nuevo, porque no puedo tocar a los demás".