Frank Cuesta visitó 'El hormiguero' la noche del 7 de febrero, aunque esta vez, a diferencia de su primera visita, acudía sin que le obligaran. Con motivo del estreno de la nueva temporada de 'Wild Frank' en DMAX, el extenista acudió al programa de Pablo Motos y, una vez más, se mostró sin filtros a la hora de hablar de la dura situación de su mujer, su opinión sobre los grupos animalistas y experiencias con las que se ha sentido al borde de la muerte.
Pablo Motos, presentador de 'El Hormiguero'
En este término el presentador se animó a compartir una dura experiencia que en su momento pensó que no la contaría. Fue en el juego de Trancas y Barrancas, las mascotas del programa, cuando Motos confesó la terrible situación por la que estuvo apunto de morir. "Me dejaron una moto de agua y me dijeron que había que encenderla antes de sacarla, no vaya a ser que luego en el agua no la pudiera encender", confesaba este.
Entonces la moto pareció haber adquirido vida, dejando al valenciano muy mal delante de todos los presentes en la playa. "La moto se mete mar adentro y yo como un imbécil me tiro y me pongo a nadar detrás", expresaba, anunciando que trataba de aparentar normalidad, porque no quería quedar como un "gilipollas". "Pillé una hipotermia, que al principio te da frío, pero lo jodido es que se luego se te va el cerebro. No sabes donde estás, no te funcionan las manos. Llegué de milagro a mi casa", añadía Pablo Motos.
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Todo por la audiencia
No es la única vez que el presentador de 'El Hormiguero' ha jugado con el peligro. Lo hizo en sus inicios en televisión, colocándose un escorpión en la cara de manera voluntaria. "Me parecía que eso conseguiría un poco más de audiencia", confesaba en el mismo juego de las hormigas, no sin anunciar que era un acto del que a día de hoy se arrepentía enormemente.