Jordi Évole, tras años gestionando una de las entrevistas más esperadas de 'Salvados', por fin pudo conversar con el Papa Francisco en su programa. Al comenzar la charla, Évole afirmó que su encuentro se dio básicamente para hablar de la crisis migratoria y los refugiados, pero el periodista también dejó caer que podría llegar a preguntarle sobre otro tipo de cuestiones.
El Papa Francisco en 'Salvados'
Y así fue. Jordi Évole aprovechó la oportunidad para intentar ahondar en la opinión de Francisco I sobre ciertos temas muy polémicos, como los abusos sexuales en la Iglesia, la homosexualidad, el feminismo e incluso el aborto. Por la parte que respecta al obispo de Roma, no tuvo problema en hablar abiertamente e intentar responder a prácticamente todas las preguntas que le planteaba Évole.
La crisis migratoria
Uno de los primeros asuntos que trataron fue la crisis migratoria. "No entiendo la insensibilidad ni la injusticia que hace que una persona emigre buscando cosas mejores y la injusticia de que alguien le cierre la puerta", contestaba el Papa Francisco sobre esta cuestión. "Europa se olvida de que está hecha de migrantes que vinieron con corrientes migratorias y de que sus hijos golpearon las puertas de América tras las guerras", añadía.
En la línea de este tema, el Papa Francisco también se atrevió a opinar sobre el famoso muro que Trump quiere levantar en la frontera con México, algo que para él es un hecho incomprensible. "El que levanta un muro termina preso del muro que levantó", sentenció.
Los abusos sexuales en la Iglesia
Teniendo en cuenta la magnitud que han llegado a alcanzar los abusos sexuales en la Iglesia, era evidente que Jordi Évole iba a querer tratar el tema con el Papa Francisco, sobre todo porque recientemente en nuestro país ha salido a la luz un documental que ha puesto de manifiesto las dimensiones de este delito en España, 'Examen de conciencia'. "Al cubrir, se propaga. Una vez que entra la cultura del destape, las cosas no se propagan", dijo el pontífice, antes de animar a todas aquellas víctimas de abusos a denunciar.
El Papa Franciso y Jordi Évole en 'Salvados'
"Si yo hubiera ahorcado cien curas en la plaza San Pedro abusadores... '¡Qué bien, ya hay un hecho concreto!'", expresaba el Papa Francisco, dando a entender que ciertas personas hubieran preferido eso, pero él no. "Hubiera ocupado espacio y mi interés no es ocupar espacio, sino iniciar procesos sanadores", añadía. "Era costumbre tapar todo, no solo los abusos de la Iglesia, sino abusos de todo tipo".
Aborto, prostitución y feminismo
Siguiendo con los asuntos polémicos y que aún aguardan resquicios de ser un tema tabú para ciertas personas, Jordi Évole sacó a colación la prostitución. "Cada uno es señor de sus decisiones y eso merece respeto", dilucidó. Además de eso, también le cuestionó otros temas relacionados, como por ejemplo los embarazos no deseados y, por ende, el aborto. "Yo la entendería a ella en su desesperación, pero también sé que no es lícito eliminar una vida humana para resolver un problema", explicó el Papa Francisco, muy contundente.
"¿Se encuentra bien representada la mujer en la Iglesia?", preguntó el periodista, a lo que el Papa Francisco negó con la cabeza directamente, mostrándose apenado. "La Iglesia no puede ser Iglesia sin la mujer. Es impresionante la riqueza que te da una mujer", señalaba, a la vez que mostró su admiración por la visión e ideas de las mujeres. "Todos estamos al servicio, pero parece que a las mujeres además del servicio les está reservada la servidumbre. Y eso no está bien, es triste".
El Papa Francisco en 'Salvados'
Además de alabar la función que tiene la mujer en la Iglesia y considerar que sería necesario que estas obtuviesen más puesto dentro del ente católico, el Papa Francisco también quiso rectificar sobre unas palabras que le costaron cientos de titulares recientemente. "Todo feminismo tiene riesgo de transformarse en un machismo con falda", corregía, indicando que esa es la frase que quiso decir en ese momento.
La homosexualidad
Esa frase relacionada con el feminismo no fue la única que el obispo de Roma quiso rectificar. Cuando Jordi Évole sacó el tema de la homosexualidad, el pontífice también quiso aclarar unas palabras que dijo respecto y que fueron muy criticadas. "No soy quien para juzgar a un homosexual. Las tendencias no son pecados", aseguraba. "Si hay un caso de homosexualidad, yo comprendo que en una familia eso provoca dolor, pero tiene que haber diálogo", añadía. "Si ven cosas raras, consulten, vayan a un profesional".
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