Una chica de 'First Dates' sorprende al contar que su expareja se suicidó: "Lo tomo como una lección de vida"

El programa del miércoles 25 de octubre de 'First Dates' estuvo marcado por una confesión trágica de una de las participantes. Valentina, tatuadora colombiana de 23 años, entró al restaurante de Cuatro dispuesta a encontrar el amor. Hablando de sus relaciones pasadas, admitió que solo había tenido una pareja y que el noviazgo terminó mal."Se suicidó hace como un año", le dijo a Laura Boado, a la que dejó impactada.

"He ido a terapias, he tenido mis charlas, ahora hablo del tema abiertamente. No es que me duela, me siento un poco resignada. Ahora lo tomo como una lección de vida, aprendí muchas cosas de él", dijo Valentina al equipo de 'First Dates'. "Todo lo que pasa es por algo y le agradezco todo lo que me enseñó", concluía la participante del programa presentado por Carlos Sobera. Además, preguntada por si tenía hijos, Valentina dijo: "Sí, tengo dos hijos que había tenido con mi pareja y ahora los tengo aquí".

Su cita esa noche fue Pablo, de 21 años, un camarero que está opositando para ser policía en Madrid. En el momento de hablar de sus relaciones pasadas, Valentina le dijo a Pablo: "Acabó mal". Pablo estaba a favor de mantener el contacto con su ex, por lo que su cita tuvo que lanzarse a decirle que su anterior pareja se suicidó. "Ha tenido una vida complicada, pero yo creo que todo el mundo tiene problemas, aunque unos sean más graves que otros, y creo que la chica ha podido solventar bien su vida, coger las riendas y tirar para adelante", decía Pablo a la producción.

Cada uno por su lado

La cita no fue demasiado bien ni para Valentina ni para Pablo. A ella no le gustó nada que él quisiera ser policía: "Siempre me paran. Me dicen que si no soy una exconvicta, no me gusta". "Yo con un policía no me veo", le decía al programa. Además, no coincidieron en demasiados aspectos. Uno de ellos fue hablando de las fantasías sexuales. Ella dijo de Pablo que "es un niño": "Apenas está en pañales. Le falta conocerse y saber qué le gusta". En la decisión final, aunque admitieron habérselo pasado bien, ninguno de los dos quiso seguir conociendo al otro. Ambos coincidieron en que no encajaban demasiado.