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'MasterChef Celebrity 7' alcanzó su final en La 1 el lunes 28 de noviembre, con una primera parte en la que se descubrió que Lorena Castell y Manuel Baqueiro serían los duelistas de la edición, lo que dejaba fuera de la competición a María Escoté y Patricia Conde. No obstante, la última se convirtió en el gran centro de atención de la noche, puesto que su pesimista actitud en la prueba de exteriores, totalmente inesperada, generó muchísimos comentarios al llamar la atención de la audiencia. Por esa razón, ante el revuelo generado, la finalista decidió pronunciarse a través de su cuenta de Instagram, minutos después de que concluyera el programa, con un texto en el que contaba lo que había sentido y pedía disculpas.
"Un día nos dijeron 'esto es un show, no un programa de cocina'", comenzaba Conde, en un texto acompañado con una fotografía de la finalista junto a profesionales de la cocina del Hotel Mandarín Oriental Ritz, donde tuvo lugar la última prueba de exteriores de la edición. La vallisoletana recordó que "yo siempre he sido partidaria del amor y del humor", por lo que "cuando me gritan o no me tratan bien, no lo sé gestionar". "Realmente en la final me bloqueé ante tanta presión, pero no solo la del cocinado, sino la de toda la gente que tenemos en frente dando órdenes y sobre todo de lo que dirán de nosotros en redes sociales después. Que ya sabéis algunas terribles consecuencias", apuntó Conde, consciente de lo comentado que era el programa.
Manu Baqueiro trata de animar a Patricia Conde en la prueba de exteriores de la final de 'MasterChef Celebrity 7'
La finalista confesó no haber visto nunca el programa "y quise investigar desde dentro", tras lo cual quiso dejar claro que "les estoy eternamente agradecida por la oportunidad de que todos me hayan conocido y ahora sepan que soy actriz y no presentadora, por ejemplo". Asimismo, Conde recordó que "lo he dicho muchas veces, soy sensible y vulnerable y mi salvavidas es el sentido del humor": "Nos dicen que cocinemos o que hagamos un show divertido, como los que nos ha ofrecido mi querido Xavier". "Cada uno vive las experiencias a su manera, no todos somos iguales, pero lo que yo he hecho ha sido tratar a todos mis compañeros con respeto pasara lo que pasara", recalcó la vallisoletana.
"Siento no haber sido más competitiva"
"En lugar de sacar el estrés gritando o insultando a los demás, he preferido reírme de mí misma e inmolarme en un divertido show para quitarle hierro al asunto", confesó Conde. La finalista del talent también señaló que "yo no le pedí a nadie llegar a la final", al igual que "yo no eché a Isa o a Nico", a los que mencionaron los jueces varias veces al valorar la actitud de la vallisoletana, quien reconoció que su marcha, "de hecho, me pareció injusto y me hubiera cambiado por cualquiera de los dos, ellos lo saben". Conde llegó incluso a "pedir perdón" a sus seres queridos, al igual que al equipo de 'MasterChef Celebrity' "y a todos los que han creído en mí más que yo misma".
"Pero, ¿sabéis lo que os digo? Que el giro de la película era que Manu se llevara la chaquetilla porque se lo merecía más que nadie y me sobraban los motivos para frenar y dejar que me adelantara", confesó la finalista, para después lamentar "no haber sido más competitiva y ambiciosa, soy así". "Cómo habéis visto, tímida, algo rebelde y muy sensible... y payasita. Y, sobre todo, no puedo con las mentiras y, antes de ofender a un compañero o creerme mejor que nadie, prefiero reírme de mí misma y ofrecer un show", se definió Conde, quien remató su explicación con un gracias y un "lo vuelo a decir: la televisión es mentira".
