Los días pasan dentro de 'Maestros de la costura' y, poco a poco, el programa se va acercando a su ecuador. Los nervios de principiantes han pasado a ser nervios por conseguir llegar a dicho punto, lo que ha terminado por jugar alguna mala pasada a los concursantes. Ese ha sido el caso de Pedro, que tras dos semanas en la cuerda floja, finalmente, ha sido el cuarto expulsado del talent.
Pedro y Sergio en 'Maestros de la costura'
Las pruebas de la gala pasada nos dejaban un toque más que nostálgico. Los concursantes debían recrear cuatro looks de la película "Mujeres al borde de un ataque de nervios", unos de los filmes más míticos de Pedro Almodóvar y que revolucionó por completo nuestro panorama cultural. Lo que revolucionó también fue el taller, ya que Pedro (aprendiz) no supo cómo lidiar bien con la presión y terminó por convertirse en el peor de la prueba. Y eso que contó con la ayuda de Rossy de Palma y Loles León, que visitaron el programa para inspirar a los concursantes y recordar cómo fue para ellas rodar dicha película.
La prueba de exteriores se trasladó hasta Manresa, concretamente a la sede de la firma de bolsos y joyería Tous. Allí, los aspirantes a modisto debían confeccionar un bolso de la firma con joyas incrustadas, pero había un problema, debían hacerlo sin patrones. En esta fase, ninguno de los dos equipos estuvo a la altura que los jueces esperaban, y tanto Lorenzo Caprile, como Palomo Spain y María Escoté confesaron su decepción. Finalmente, el equipo integrado por Lara, Pedro, Alejandro y Sergio fue el que acabó nominado, por lo que tuvieron que enfrentarse a la prueba de eliminación.
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Una decisión entre Sergio y Pedro
La última oportunidad de los aprendices para permanecer en el concurso no iba a ser fácil. Los cuatro aspirantes debían confeccionar un sombrero, una pamela o un tocado original. Lara y Alejandro consiguieron superar el reto, pero Sergio y Pedro quedaron en la cuerda floja. Este último era la segunda vez que pisaba la zona de "nominación" y, tras las críticas del público por lo que se consideró una "injusta" expulsión de Saray, no era de extrañar que fuera él quien se llevara la palma. Como así pasó. A pesar del mal trago, el concursante quiso irse con un buen sabor de boca, agradeciendo al programa todo lo que había aprendido.