Esta primera -y quizás última- legislatura de Pedro Sánchez se acaba. El presidente del Gobierno anunció el pasado 15 de febrero que adelanta las elecciones generales al 28 de abril, después de que los partidos independentistas no retirasen las enmiendas a la totalidad que impedían que se aprobasen los presupuestos generales del Estado. El socialista ya había anunciado que, probablemente, esto ocurría si ERC y PDeCAT no cejaban en su posición y, ahora, España se ve en la tesitura de elegir nuevo gobierno en uno de los panoramas más convulsos de estos últimos años.
Pedro Sánchez con Carlos Franganillo
Convulso porque la crisis catalana es un tema latente que parece no tener cómo resolverse y, de hecho, ha sido uno de los factores principales -sino el principal- para forzar el acortamiento de la legislatura de Sánchez, ya que los independentistas exigían unas cosas por un lado, la derecha convocaba manifestaciones en su contra, por otro, y así se quedaba Sánchez solo en el poder. No obstante, tal y como ha expresado el presidente del Gobierno en su entrevista con Carlos Franganillo en el 'Telediario' de La 1, no se arrepiente de nada. "Hemos abogado por el diálogo dentro de la Constitución", expresaba, alegando a que "eso es lo que hay que hacer en democracia". El problema, según él, es que "el independentismo tiene pavor a dialogar".
No obstante, para Sánchez, la responsabilidad de este "fracaso" para poner fin a la cuestión catalana no ha sido solo de los independentistas, también de que PP y Ciudadanos "han utilizado el 155 como arma electoral, de una manera irresponsable". "Lo que están haciendo es echar más gasolina a ese incendio", sentenciaba. "Quieren enquistar el problema en Cataluña". Y es que, desde estos partidos, se ha llamado a la alarma nacional por creer que el socialista era un aliado de los independentistas, ya que gracias a ellos prosperó la moción de censura que echó del gobierno a Mariano Rajoy. "Si en el mes de junio, esos grupos hubieran votado que no y hoy estuviera aquí Mariano Rajoy, ¿eso significaba que él había pactado con los independentistas?", se preguntaba Sánchez. "Es evidente que no", continuaba. "Nunca ha habido un acuerdo con los independentistas, lo que hubo fue una solución de responsabilidad por parte de una mayoría parlamentaria"
No descarta un entendimiento futuro
Culpables aparte, el presidente del Gobierno afirmaba a la par que, pese a todos estos problemas, no se cierra al entendimiento futuro ni con los independentistas, ni con PP, Ciudadanos, Podemos o con cualquier otra formación política, mientras que los dos principales partidos de la derecha española han manifestado que van a poner un cordón sanitario al PSOE. "Yo pienso que como demócratas tenemos que reconocernos. Lo que están haciendo es excluir, es no respetar nuestro sistema democrático, porque yo estoy representando a millones de ciudadanos también", sentenciaba.